- El secretario de Investigación del Centro de las Artes de la UAA afirmó que se debería aprovechar la discusión para formalizar más la enseñanza artística
- A nivel primario, la enseñanza artística se limita a 40 horas anuales
- En preescolar y secundaria hay educación artística más formal, en primaria básicamente no existe
Raúl Capistrán García, secretario de Investigación del Centro de las Artes y la Cultura de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA), señaló que aprovechando la nueva reforma a la que se pretende someter la Ley de Educación, se debería formalizar aún más la enseñanza artística y extenderla a la educación primaria donde es prácticamente inexistente.
Como lo indicó Raúl Capistrán, la discusión de la Reforma Educativa debería incluir la enseñanza musical y artística de manera que esta sea más formal y extendida en las escuelas: “Es lo que queremos y de eso se trata, poco a poco ir visibilizando áreas de oportunidad, vacíos, para crear conciencia”.
Al año, en nivel primaria se dan 40 horas de educación musical, pese a los beneficios que puede ofrecer este tipo de aprendizajes, sin tomar en cuenta que muchas clases son canceladas por los días festivos y otros días en los que no hay clases.
La educación artística sigue siendo considerada como materia de relleno, lamentó el docente universitario.
En preescolar y secundaria, apuntó Capistrán García, son impartidas clases de educación artística, en primaria esto no ocurre, al menos de manera formal y cuando ocurre son los normalistas quienes se encargan de impartir este tipo de conocimiento: “Pueden tener un deseo muy grande transmitir, pero le falta la preparación disciplinar, sólida, hay varios vacíos, paro lo más importante es visibilizarlas y saber qué vamos a hacer”.
En las secundarias, la educación musical se suele limitar al conocimiento y aprendizaje de melodías en la flauta dulce, sin embargo, y pese a lo poco probable que parece ser, según el secretario, algunas personas desarrollan un gusto musical y ganas de aprender a tocar profesionalmente, lo que los lleva a las orquestas infantiles que hay en Aguascalientes como la Compas, la Esperanza Azteca o la de Jesús María, “si ejerce un impacto”.
En Aguascalientes, detalló Raúl Capistrán, existen tres orquestas infantiles que han tratado de replicar el sistema de educación musical colombiano, un esquema difícil de definir incluso por sus creadores; señaló: “Ha sido un proceso de ensayo y error, lo han definido algunos estudiosos de este enfoque de educación musical”.