- “Hemos tenido situaciones en las que por estrategias de retención del poder o simulación de la paridad, las mujeres son electas pero realmente no están gobernando ellas sino sus maridos”, destacan especialistas
- Concluyen las Jornadas de Justicia Electoral e Igualdad de Derechos con el análisis de la realidad política electoral de mujeres y personas con discapacidad
En un escenario violento, de simulación y en el que se convierte necesaria una judicialización de procesos para hacer valer sus derechos políticos electorales, es como las mujeres compiten por los puestos de elección popular y cargos de poder y decisión en el país y en Aguascalientes.
El anterior planteamiento fue uno de los temas discutidos en el marco de las Jornadas de Justicia Electoral e Igualdad de Derechos organizadas en Aguascalientes como un esfuerzo interinstitucional del Comité de Participación Ciudadana, autoridades y Tribunales Electorales, así como la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Después del avance respecto a cuestiones de paridad de género, ahora el reto está en visibilizar las condiciones en las que compiten las mujeres en las elecciones, “porque es cierto que el país enfrenta una situación de violencia sostenida, desapariciones y otros problemas que alcanzan al ámbito político”, se destacó como parte del Taller de Justicia Electoral en el acceso y ejercicio del poder de las mujeres en México.
Georgina Cárdenas Acosta, doctora en antropología social e investigadora de la Red de Politólogas No Sin Mujeres, abordó un tema clave para desentrañar las barreras que enfrentan las mujeres en el ámbito electoral y político como lo es la simulación en el poder.
Al respecto, explicó que las mujeres en no pocas ocasiones son utilizadas por fuerzas partidistas o políticas como simples figuras decorativas en el poder “hemos tenido situaciones en las que por estrategias de retención del poder o simulación de la paridad, las mujeres son electas pero realmente no están gobernando ellas sino sus maridos o los hombres”.
Todavía es necesario trabajar cultural y socialmente para que la ley se traduzca en igualdad sustantiva y reconocimiento real de las mujeres, destacó.
Por referencia, dijo que en estados como Chiapas, Puebla y Oaxaca, -sin que sea un problema exclusivo de aquellas zonas-, se puede detectar esta simulación en la que las mujeres son obligadas a ejercer algún cargo de “mando” político.
Al cierre de las Jornadas de Justicia Electoral e Igualdad de Derechos, de igual forma se abordó la necesidad de inclusión en las grandes decisiones políticas y sociales de sectores vulnerables como las personas con discapacidad y en este sentido, es se dejó en claro que es momento de hacer valer sin restricciones la Convención sobre Derechos de las Personas con Discapacidad que establece su derecho a participar en la vida política y en la vida pública, lo que incluye el derecho a tomar sus propias decisiones, elegir a sus gobernantes o a ser elegidas como cualquier otra persona, a ejercer cargos y desempeñar cualquier función pública.