Venezuela: confrontación geopolítica / Taktika - LJA Aguascalientes
24/11/2024

Washington, D.C. La Casa Blanca. 28 de enero de 2019. El asesor de Seguridad Nacional John Bolton, cuyo rostro semeja una morsa estreñida, anuncia -en compañía del secretario del Tesoro, Steve Mnuchin- que la Unión Americana ha congelado todos los activos de la empresa petrolera Petróleos de Venezuela SA (PDVSA) en su territorio.

Asimismo, Bolton comenta que los Estados Unidos han “seguido exponiendo la corrupción de Maduro y sus compinches, y la medida de este lunes asegura que ya no puedan saquear los bienes del pueblo venezolano”. El furibundo funcionario agrega: “Pedimos al ejército venezolano y a las fuerzas de seguridad que acepten la transición pacífica y democrática del poder”. Finalmente, y quizá por descuido, en la libreta de Bolton aparecen garabateada la siguiente nota: “5 mil soldados en Colombia”.

La escena arriba mencionada sirve como preámbulo al presente artículo, el cual tiene por objeto explicar la confrontación geopolítica que tiene por escenario a la patria de Simón Bolívar y Rómulo Gallegos: Venezuela.

Desde que Hugo Rafael Chávez Frías asumió, el 2 de febrero de 1999, la presidencia de Venezuela estableció un curso de colisión con los Estados Unidos. ¿El motivo? La ideología chavista -amalgama de agrarismo, nacionalismo y socialismo- chocaba con los intereses del big business estadounidense, pues para los estadounidenses su objetivo primordial era: “Que Venezuela continúe proveyendo una porción significativa de nuestras importaciones de petróleo y continúe siguiendo una posición de precios del petróleo moderada y responsable en la OPEC”1.

Una vez que Chávez desapareció físicamente, la batuta del movimiento pasó a Nicolás Maduro Moros quien, carente del carisma de Chávez, ha intentado conducir a Venezuela bajo una andanada de sanciones y descalificaciones provenientes de Washington. Cabe mencionar que, tanto Chávez como Maduro, cometieron errores y excesos en los aspectos económico y político. ¿El resultado? El empobrecimiento y la división de los venezolanos.

La autoproclamación del líder de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, el día 23 de enero de 2019, como presidente encargado de Venezuela desató una efervescencia dentro y fuera del país caribeño. Guaidó fue reconocido inmediatamente por los Estados Unidos y sus adláteres en el llamado Grupo de Lima.

Maduro, sin embargo, recibió el apoyo de: China, país que ha proporcionado créditos por 50 mil millones de dólares y quien es el principal acreedor de Venezuela; Cuba, el mayor aliado ideológico del régimen chavista; Turquía, el primordial importador de oro venezolano, pues los turcos compran el metal áureo y, a cambio, envían alimentos; Irán, nación del Medio Oriente, la cual es acusada por los servicios secretos estadounidenses de recibir “credenciales de identidad locales”2 para llevar a cabo actividades de espionaje en América Latina.

Rusia es, no obstante, el mayor valedor con que cuenta Maduro, pues Venezuela es el principal comprador de armamento ruso en América Latina y las compañías petroleras han invertido 4.1 mil millones de dólares. Por ello, y de acuerdo a la agencia Reuters, centenares de mercenarios rusos – pertenecientes al Grupo Wagner, una organización de contratistas militares privados, ligada al Kremlin- se han venido infiltrando en Venezuela para actuar como una guardia pretoriana al servicio del mandatario venezolano3. Aunque esto último ha sido negado por el gobierno ruso.

El presidente Vladimir Putin conferenció vía telefónica con su contraparte venezolana y le dijo: “La interferencia externa destructiva es una cruda violación de las normas fundamentales del derecho internacional”. Finalmente, Putin “reafirmó el deseo compartido de continuar con la cooperación ruso-venezolana en una variedad de áreas”4.


El apoyo y la advertencia de los aliados externos de Maduro cayó en oídos sordos: el viernes 25 los estadounidenses movieron fichas: un personaje despreciable y sombrío, Elliot Abrams, fue nombrado enviado especial para Venezuela. Durante los años 1980, Abrams fue acusado de apoyar las violaciones a los derechos humanos cometidas en El Salvador, Guatemala y Honduras, países vinculados a Washington. Igualmente, fue condenado por su participación en el escándalo Irán-Contras.

Ese mismo día, el secretario de Estado, Mike Pompeo, autorizó que Juan Guaidó recibiera y controlara los activos del gobierno de Venezuela y del Banco Central de Venezuela para el uso de su gobierno. Al día siguiente, Pompeo declaró, ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que los Estados Unidos “no podían ignorar el sufrimiento o la tiranía” en Venezuela.

Bolton, el hombre de las cejas pobladas, tuvo un arranque de sinceridad con respecto a los verdaderos objetivos estadounidenses en Venezuela: en el programa Prime Time de Trish Regan, transmitido por la cadena Fox News, el asesor de Donald Trump reconoció que “haría una gran diferencia para los Estados Unidos, económicamente, si pudiéramos tener la inversión y capacidades de producción de compañías petroleras estadounidenses en Venezuela”5.

¿Qué sigue en Venezuela? La respuesta está en: la lealtad del Ejército Bolivariano a Nicolás Maduro. Si los soldados venezolanos permanecen leales al proyecto chavista, Maduro podrá resistir la presión proveniente del exterior; segundo, el acceso que tendrá Juan Guaidó a los millones de dólares, en cuentas del gobierno venezolano, que Washington y sus aliados pondrán a disposición de su acólito; y, tercero, el apoyo, diplomático y militar, que Maduro reciba de China, Cuba, Irán y, sobre todo, Rusia.

El escribano concluye: la última palabra no ha sido dicha en el drama venezolano y, lamentablemente, días aún más crueles y oscuros se ciernen sobre el lago de Maracaibo y el delta del Orinoco.

Aide-Mémoire. El Brexit y la lucha comercial de los Estados Unidos contra China son los otros dramas que no hay que perder de vista.

 

1.- – All about Oil: WikiLeaks Reveals US Objectives in Caracas as Regime Change Looms https://goo.gl/4xqXcX

2.- Kaplan, Robert D. Imperial Grunts. Random House, New York, 2005, p. 78-79

3.- Exclusive: Kremlin-linked contractors help guard Venezuela´s Maduro –sources https://reut.rs/2RLSI6R

4.- Telephone conversation with President of Venezuela Nicolas Maduro https://bit.ly/2TbzZOz

5.- HootHootBerns#RunBernieRun https://bit.ly/2MFH4oe


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