- Al año se suman 100 comerciantes, sobre todo a finales de año cuando se dan despidos en las empresas
- 178 comerciantes han sido apercibidos por no cumplir normas de salubridad; 50 personas que venden hígado son altamente vigiladas
Federico Moreno Flores, director de Salubridad Pública Municipal, informó que en 2018 han sido apercibidos 178 comerciantes ambulantes que venden alimentos por incumplir las normas de seguridad, en total se calcula que en la ciudad hay cerca de seis mil de estos negocios y al año se suman aproximadamente 100 nuevos.
El director de Salubridad informó que durante 2018 se han aplicado 178 apercibimientos a personas que venden alimentos en la vía pública por no cumplir los lineamientos de higiene como mantener sus espacios limpios, portar un mandil, cubre cabello o por ofrecer productos en mal estado.
Los 178 casos, puntualizó Moreno Flores, consisten en apercibimientos pues es hasta la segunda ocasión en que los comerciantes incumplen las normas, que se impone una multa que parte desde los 130 pesos.
Los comerciantes que venden alimentos en la calle, afirmó el director, acuden a una charla donde son concientizados sobre el manejo de alimentos, por lo que en 2018 se considera que el 95 por ciento de quienes expenden alimentos están cumpliendo con las especificaciones.
La multa de solo 130 pesos, explicó Federico Moreno, tiene el objetivo de que no se genere una imagen del municipio como una estrategia recaudatoria, sino que pretende proyectarse la imagen de un gobierno concientizador, “Debemos de cambiar nuestra conducta para con nuestra sociedad y debemos de ser responsables quienes vendemos alimentos”.
En el caso de que se vendan alimentos echados a perder, detalló el titular de Salubridad, el alimento es asegurado y se da parte a la Dirección de Mercados. Los verificadores trabajan entre las 7:00 y las 23:00 horas del día en dos turnos y portan un termómetro para checar la temperatura de los alimentos: en caso de ser fríos no deben pasar los 7 grados y en caso de ser caliente los 79 grados.
Un alimento en el que se tiene especial atención, agregó Moreno Flores, es el hígado, pues este órgano suele contener el clembuterol con el que se llega a alterar el ganado, por lo que existe un padrón de personas que venden este producto de quienes se conoce nombre, dirección de su vivienda y contactos, para que en caso de que se reporte un caso de intoxicación, llegar a sus proveedores; en 2018 no ha sido detectado ningún caso.
En total, agregó el titular de Salubridad, se calcula que hay cerca de seis mil ambulantes que se dedican a la venta de alimentos en vía pública aunque es complicado conocer la cifra exacta pues cada día aparecen más pues se sabe que cerca de 100 comerciantes nuevos se suman a la estadística anualmente, sobre todo a finales de año cuando muchas empresas despiden a sus trabajadores resultando la venta de comida una opción viable para ellos.