La Jornada Aguascalientes
Presente
Por este medio me dirijo a los directivos de este prestigiado diario para contarles la trágica historia que viví junto con mi esposa, una historia de extorsión que debe interesar a todos, porque todos los ciudadanos somos potenciales víctimas del fraude que hoy se da todos los días al amparo de las tiendas OXXO, que como ustedes saben, se encuentran esparcidas por todo el país.
Hace unos días le llamaron a mi esposa a la casa, diciéndole que me tenían secuestrado. Sabe, somos de la tercera edad y ella no utiliza teléfono celular. Le pidieron 50 mil pesos. Ella, por los nervios no corroboró mi condición, y les dijo que sólo tenía 5 mil, a lo que accedieron dando un número de cuenta, con la indicación que lo hiciera en 5 tantos de 990 pesos en diferentes tiendas OXXO.
Cuando decidimos levantar la denuncia en el Ministerio Público, nos dijeron que en la empresa OXXO tenía que proporcionar el nombre del dueño de la cuenta. Regresamos al OXXO para pedir los datos y los empleados solamente se rieron y nos dijeron que esa información no la obtendríamos en ningún lado.
Es preocupante cómo estas tiendas operan sin regulación alguna.
Pasaron de un día a otro, de ser una mera cadena de abarrotes a un gran centro distribuidor de equipos telefónicos y tarjetas de débito, todo ello sin reparar en la identidad del comprador, ya fueran menores de edad o probables delincuentes, fomentando con ello la comisión de delitos como la extorsión en todo el país.
Estoy decidido a que mi historia no sea una más. Hemos sufrido en carne propia la extorsión y mi esposa ha perdido la tranquilidad.
Acudiré a los medios de comunicación, y si es necesario al nuevo gobierno y a los legisladores, porque estamos frente a una actividad totalmente irregular, sin vigilancia alguna. Lo más grave de todo es que estas tiendas OXXO ofrecen servicios que rebasan su capacidad para lo que originalmente fueron creadas.
Es fundamental alertar a la población de todo México y todos debemos sumarnos y exigir que la autoridad ponga orden.
Sé que entenderá que lo hago precisamente por temor a ser objeto de represalias, por lo que no le aporto más datos de mi persona.
Aprovecho esta vía para expresarle mi reconocimiento por la valiente labor periodística que usted realiza, así como su prestigiado medio.
Muchas gracias nuevamente por el interés que brinde a la presente.
Gracias
Patricio Hernández