- Temen que se utilice constantemente este mecanismo para legitimar otras decisiones
- Se dicen a favor de las consultas públicas, pero bien estructuradas
Los empresarios de Aguascalientes temen a las consecuencias que traerá la consulta sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) que trajo como resultado el no continuar con el proyecto que sigue en construcción en Texcoco; consideran que esta situación traerá desconfianza a los inversionistas extranjeros, además de las ya visibles como el aumento del precio del dólar estadounidense.
Pedro Gutiérrez Romo, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Aguascalientes, lamentó que la consulta que realizó el Movimiento de Regeneración Nacional haya sido un ejercicio poco confiable, el número de personas que participaron tampoco es representativo y no es vinculante; aunque finalmente el próximo presidente Andrés Manuel López Obrador puede tomar la decisión que sea, con o sin consulta.
El líder empresarial reiteró que el resultado de esta consulta ciudadana él la conocía desde que López Obrador señaló que la llevaría a cabo, ya que el tema del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México lo manejó desde su campaña.
Dijo temer que esta situación de echar para atrás la construcción del aeropuerto en Texcoco dé un mensaje de desconfianza para los inversionistas que pretenden venir a participar a México con algunos proyectos, ya que siempre buscan proteger su inversión en un Estado de Derecho y no se vean suspendidos con avances de más del 30 por ciento de las obras.
“Despierta inquietud lógica en cualquier inversionista, y de esa manera afecta a todo el mundo; tanto los que votaron a favor como los que votaron en contra del proyecto de Texcoco, la gente va a sufrir las consecuencias. Creo que sí las va a haber a corto, mediano y largo plazo”, manifestó Gutiérrez Romo, al destacar la inmediata subida del precio del dólar estadounidense y no dudó que también surja una depreciación en la Bolsa de Valores Internacional.
Destacó que la preocupación de los empresarios por esta situación trasciende también a Aguascalientes, ya que depende mucho de las inversiones nacionales y extranjeras, pues se considera que puede desaparecer el interés de esta opción.
Otro de los temores es que, así como desde hace meses sabían cuál iba a ser el resultado de la encuesta, se utilice este mecanismo para legitimar otras decisiones, una manera anticuada, pero con visos de ser moderna; con tendencias a hacer lo que le interesa al grupo en el poder.
–¿Están los empresarios entonces en contra de las consultas públicas?
–Claro que no, estamos a favor de una consulta bien cimentada, con suficiente responsabilidad y técnicamente válida. En la Constitución ya está normada.