- Si hay buenas cosechas, el comercio en general se beneficia
- Papelerías, tiendas de ropa y calzado, sectores con mayores ventas en el regreso a clases
Han sido fructíferas las precipitaciones, aunque las lluvias se han registrado en los últimos días en exceso y quienes aún no siembran deberán esperar un poco, pero para quienes ya habían sembrado en polvo, resulta de gran beneficio el agua pluvial, apuntó el presidente estatal de la Cámara Nacional del Comercio, Rubén Berumen de la Cerda; con la producción en el campo la derrama económica se extiende a la ciudad, con lo que en los comercios se registran también mejores ventas.
En este sentido se espera que sea un buen temporal y que las lluvias no se acaben pronto, que llegue el tiempo de cosecha, porque se maneja mucho dinero en todo el comercio en general; señaló que con el recurso suficiente, los productores y agricultores se pueden dar el lujo de adquirir todo lo necesario en el hogar, son épocas en que compran ropa y calzado para las familias, en tanto que durante el periodo de siembra y cosecha, también recurren, sobre todo a los negocios como ferreterías, a adquirir las herramientas que les son necesarias para llevar a cabo este proceso, o en refaccionarias por lo que necesiten para arreglar remolques, entre otros implementos agrícolas.
“Los que siembran en temporal sacan cuando menos pastura y eso también es muy importante para todo el sector ganadero, entonces, sí cuando llueve, llueve dinero (…) ahorita baja un tanto la actividad comercial porque la gente se dedica a sus labores, pero una vez que sale la cosecha se reactiva considerablemente”.
El líder de la Canaco precisó que esta temporada es buenas para quienes se dedican a la renta de salones de fiesta, venta y renta de trajes y vestidos, y todo lo relacionados con las celebraciones para los egresados de las instituciones educativas, pero no es un sector muy amplio el que se beneficia con estos eventos, además de que las familias limitan sus gastos previendo que en el ingreso al nuevo periodo escolar implicará gastos.
Recalcó que se ha perdido la cultura del ahorro y no son nada previsores, quienes saben que enfrentarán esto gastos, pues deberían guardar con tiempo algo de dinero para cuando necesitaran echar mano de ese recurso, como en esta época de graduaciones; con el regreso a clases aumenta la afluencia en casas de empeño a dejar los bienes en garantía para poder cubrir los gastos.
En los sectores papelero, de ropa y calzado las ventas incrementan hasta en un 100 por ciento, porque las familias destinan todo el recurso a comprar lo necesario para que los niños puedan regresar a la escuela con los útiles escolares y el uniforme completo. “Lo que redunda es que todos necesitamos de todos, esto es una cadena y somos eslabones cada quien en nuestro sector”.