- Hay diferentes grados de autismo
- Algunos niños tienen problemas motores, un retraso en habilidades para sentarse, gatear o caminar
En la dirección de Servicios Médicos del DIF estatal se impartió la conferencia Generalidades del Autismo, a cargo de la neuróloga pediatra Mónica Pelayo González, quien señaló que la prevalencia de este trastorno en el desarrollo neurológico es cercana al .85 por ciento de la población.
La detección precoz y la intervención temprana de especialistas permiten que la persona autista tenga una mejor calidad de vida, sobre todo cuando se presenta un retraso en aspectos relacionados con el desarrollo del lenguaje y la interacción social.
Existen dos tipos de autismo: el primario, que es cuando existe una alteración en algunos cromosomas y hay cierta predisposición genética; y el secundario, cuando se tiene un antecedente de una lesión cerebral.
El autismo se manifiesta desde antes de los dos años, y los padres de familia pueden observar algunos signos como pueden ser: rechazo a la lactancia materna, generalmente no les gusta el contacto físico, no ven a los ojos, tienen movimientos repetitivos con las manos y cabeza, manifiestan un retraso en el área del lenguaje o en su motricidad.
Los problemas motores se pueden identificar con el hecho de que tardan en adquirir las habilidades para sentarse, tomar una cuchara, gatear y caminar. El autismo se clasifica dependiendo del grado de funcionalidad de la persona, ya que hay quienes pueden llegar a tener una vida casi normal, sólo con pequeños problemas en la interacción social.
También hay personas que por su grado de autismo requieren de un cuidador, ya que no pueden tener una vida independiente, por lo que se les dificulta relacionarse con los demás, y esto genera una discapacidad de acoplamiento al entorno en el que se desenvuelve.
No existe un tratamiento para curar el autismo, pero sí se pueden atender algunas cuestiones como trastornos del sueño, problemas conductuales, irritabilidad, epilepsia, entre otros.
Pelayo González reconoció que no existe una atención integral para la persona con autismo y es complicado que en los estados de provincia se cuente con centros especializados en el tema; indicó que en Aguascalientes sólo existen dos sitios privados en donde se puede dar un servicio dirigido a estos pacientes.
Con relación a los menores de edad, dijo que la recomendación es que los padres de familia se acerquen a un paidopsiquiatra infantil o un neurólogo pediatra, ya que son los especialistas que pueden analizar el área médica y descartar alteraciones estructurales en el cerebro.
Con información del DIF estatal