Víctor Hugo Salazar Ortiz
Movimiento Ambiental de Aguascalientes A.C.
El día de hoy, 22 de abril, se conmemora un aniversario más del Día de la Tierra. El inicio de esta celebración tiene su origen en el año de 1970 cuando Gaylord Nelson, senador del estado de Wisconsin en los Estados Unidos, convocó a una reunión de varias instituciones educativas para hacer un llamado al gobierno de los Estados Unidos a poner más atención en el tema del cuidado y protección de los ecosistemas y de sus bienes naturales, los cuales, debido a su irrestricta explotación estaban siendo dañados y contaminados seriamente. La iniciativa de celebrar año con año el día de la Tierra se hizo mundial hasta el año de 1990 y hoy día en todo el mundo se realizan eventos especiales para conmemorarlo.
Cada año se hace un énfasis especial del trabajo que debe hacerse para cuidar la Tierra durante el año, iniciando éste precisamente el 22 de abril. El año pasado se propuso promover el uso de energías renovables, para este el lema es «Terminar con la contaminación de los plásticos». Hay mucho que decir al respecto y sobretodo mucho en qué trabajar, pues cada uno de nosotros consumimos de manera consciente e inconsciente una gran cantidad de plásticos, esto es debido a que muchos de los productos que consumimos cotidianamente están contenidos en envases o envueltos en este material, y si a ello le agregamos que en las tiendas nos ofrecen bolsas para llevar lo que hemos comprado éste se incrementa. Por ejemplo, si vamos y compramos unas galletas, estamos conscientes de que éstas vienen en un empaque de plástico y en algunos casos tienen además un contenedor de este mismo material, pero para su distribución se empacaron en cajas plastificadas y seguramente en algún momento fueron embaladas en plástico para su distribución, como lo podemos ver en el caso de las botellas de agua o refresco, que se envuelven en plástico para su distribución en los establecimientos. Entonces, si ponemos un poco de atención, nos daremos cuenta que un alto porcentaje de lo que consumimos contiene o está envuelto en plástico, incluso antes de que lo compremos.
No está de más mencionar que el plástico puede durar hasta mil años en degradarse, no así en biodegradarse. La diferencia entre estos conceptos es que el primero hace alusión a un fenómeno de descomposición de los materiales en pequeñas partículas, incluso microscópicas, pero que no se reintegran a los sistemas tróficos naturales, o sea, no sirven como alimento a ninguna especie biótica o abiótica; en cambio algo que se biodegrada, es algo que se reintegra en las cadenas biológicas naturales sirviendo como alimento a algún animal, planta o incluso como fertilizante a la tierra. A eso se debe el enorme daño que genera en los ecosistemas el plástico. Además, debido a su lenta descomposición los rellenos sanitarios y los océanos están llenos de este material, el cual ha sido incluso encontrado, en forma de botellas o bolsas, en regiones alejadas e inhóspitas, como los polos.
Por otra parte, los plásticos son responsables de causar muertes atroces a infinidad de animales alrededor del mundo. Internet a través de sus redes sociales se ha encargado de darnos a conocer muchas de éstas por medio de imágenes y videos en los que se muestra cómo mueren muchas especies de animales terrestres y acuáticos debido a la asfixia producida por quedar atrapados en bolsas o por problemas en sus aparatos digestivos porque han ingerido productos plásticos e incluso respirado éstos, como el famoso video de una tortuga que fue rescatada y se extrajo de su nariz un popote, o la semana pasada se dio a conocer el caso de una ballena cachalote que quedó varada en una playa y en su estómago se encontró una gran variedad de productos plásticos. Estas imágenes se han vuelto rutinarias lamentablemente. No dudo que habrá quienes digan que sólo son casos aislados, pero aun así, éstos son relevantes y deben volvernos más conscientes de lo que como especie estamos provocando a otras especies y en los ecosistemas.
Con relación a esto, para los que cuentan con un sistema de señal de televisión de paga se les invita a ver durante el mes de abril en canales como National Geographic, Discovery Channel o Animal Planet documentales acerca de lo que ocurre en nuestro planeta en distintos ecosistemas alrededor del mundo, y cabe señalar que estos canales tienen una programación especial el Día de la Tierra y presentan documentales para crear consciencia de los compromisos actuales que tenemos como sociedad, y como individuos, con nuestro planeta y con la totalidad de seres que lo habitan, es decir, no sólo con la especie humana, sino con todo: plantas, animales, tierra, agua, aire; individuos, especies y elementos sin los cuales la vida no sería posible. Sin embargo, muy pocos son los que atienden a la invitación de ver estos documentales durante este mes y la programación especial del día de la Tierra.
Por otra parte, no puedo dejar de señalar que ahora que estamos de fiesta en Aguascalientes, con motivo de la Feria Nacional de San Marcos, se generan 40 toneladas extra de basura diariamente durante el tiempo que dura este festejo, y mucha de ésta son plásticos. La semana pasada se hizo viral una foto de cómo se encontraba llena de basura una parte de la zona ferial, y la verdad es que a todos los que la vimos no pudo sino generarnos indignación y preguntarnos: ¿cómo es posible que los habitantes de una ciudad que gana escobas de platino muestren este tipo de conducta? La escoba, como bien se sabe, no se gana porque la gente de esta ciudad sea limpia, sino por la enorme cantidad de dinero que se destina para barrerla.
En fin, el diagnóstico que puede hacerse de nuestra conducta ambiental en una fecha como hoy no es para nada halagador, no obstante puede y debe servirnos para hacer una reflexión de cómo nos comportamos en este rubro cada uno de nosotros y generar los cambios necesarios, si así lo deseamos, por el bien de nuestro planeta. Esta tarea debe comenzarla hoy reduciendo al mínimo su consumo de plástico y con ello unirse a la celebración del día de la Tierra.
Prohíbase el plástico.