- Una eventual imposición de un arancel de hasta 25% como lo ha expresado Trump, pondría en serios aprietos al sector automotriz en México
- Llegan ya piezas de acero listas para su colocación en la línea de ensamble, lo que seguramente se comenzaría a disminuir el consumo de acero que viene de Estados Unido
Al ser el acero el principal componente de los automóviles, una eventual imposición de un arancel de hasta 25% como lo ha expresado Trump, pondría en serios aprietos al sector automotriz en México y podría afectar seriamente a la industria y en una menor generación de empleos, consideró Jesús Enrique Ramírez Pérez, líder de la CROM.
Dijo que México y Europa están analizando el impacto que tendría un eventual impuesto a las importaciones en Estados Unidos de acero, sin embargo, no es complicado pensar que, al ser el principal componente de un vehículo, el impacto será “devastador” sobre todo en temas de productividad y de generación de nuevos puestos de trabajo.
Ramírez Pérez destacó además que mucho del acero que se emplea en la industria proviene de Asia; “llegan ya piezas de acero listas para su colocación en la línea de ensamble, lo que seguramente se comenzaría a disminuir el consumo de acero que viene de Estados Unidos, para compensar la potencial alza en los precios de los automóviles producto de este arancel que planea imponer Donald Trump como una medida desproporcionadamente proteccionista a su industria nacional.
Dijo que tras el anuncio formulado por el mandatario estadounidense, Europa evalúa a su vez imponer un arancel del 25% a las importaciones de acero de Estados Unidos, en respuesta, dijo, a las declaraciones de Trump hace un par de días sobre el pretendido impuesto al acero que ingrese a su país.
Por lo pronto, hizo un llamado a los trabajadores del sector automotriz y de autopartes, a conservar sus empleos, a esmerarse más y a incrementar la productividad como una medida para que la industria automotriz, de la batalla comercial contra Estados Unidos.
Con información de la CROM