- Especialistas ya han planeado alternativas como la reconversión de cultivos de bajo consumo de agua, concluir Distrito de Riego 01 y recargar mantos a través de fallas geológicas
- Los depósitos del subsuelo caen a un ritmo de tres metros por año
Si bien existen alternativas de solución para prevenir la sobreexplotación del manto acuífero del Valle de Aguascalientes, se necesita voluntad política por parte de parte de las autoridades para echarlas a andar, consideró Arturo Sotelo Rodríguez, secretario del Colegio de Ingenieros Geólogos.
El especialista plantea la reconversión de cultivos de bajo consumo de agua, apurar la conclusión del Distrito de Riego 01 y, principalmente, aprovechar las fallas geológicas para reabastecer los mantos acuíferos.
Dijo que son dos mil 846 pozos los hay en el estado: De los cuales 70.1 por ciento son para uso agrícola; 22.3 por ciento, público urbano; cuatro por ciento, industrial y 3.6 por ciento, pecuario.
La superficie cultivada con parcelas de riego proveniente de los depósitos subterráneos es de 39 mil 963 hectáreas, lo que equivale a un 80 por ciento del suelo agrícola estatal. El 27 por ciento corresponde a árboles frutales; 19.4, por ciento, cultivos básicos; 7.5, hortalizas y 46.1 por ciento, a forrajes.
Con la reconversión, se lograría un ahorro de 178 millones de metros cúbicos anuales: “Los cultivos que presentan una mejor opción en cuanto a menor consumo de agua, menor superficie requerida y mayor valor de la producción, son las hortalizas y los frutales”, apuntó.
Sotelo destacó la continuidad a los proyectos relacionados con la reconstrucción del Distrito de Riego 01 que permitiría irrigar con agua de la presa Plutarco Elías Calles las parcelas, que además se prevé su tecnificación por goteo, a efecto de incrementar la eficiencia del riego.
El ingeniero geólogo recordó que la pasada administración planeó recargar artificialmente los mantos acuíferos con agua tratada procedente de la planta de la ciudad de Aguascalientes, proyecto que vale la pena retomar, pero en vez de técnicas de inyección artificial inclinarse hacia la infiltración a partir de las fallas geológicas.
El Valle de Aguascalientes es una cuenca de depósito de forma alargada, con alrededor de mil kilómetros cuadrados de extensión, que representan cerca de una quinta parte del territorio estatal y pertenece a una fosa tectónica que limita con dos fallas geológicas colosales: una al poniente de alrededor de 150 kilómetros de longitud y otra al oriente de 70 kilómetros, las dos con cuatro kilómetros de profundidad: “La falla oriente se encuentra abierta por un poco más de un metro, por lo que solamente a través de ella cabrían más de 630 mil pozos inyectores”.
La condición es que el líquido alcance un nivel de potabilidad que cumpliera con las normas oficiales mexicanas de calidad.
También hay muchas otras grietas que también pueden aprovecharse, sin embargo, hace falta censarlas, ya que no se tiene información actualizada.
Cada año se extraen 556 millones de metros cúbicos de agua del subsuelo, el manto acuífero del Valle de Aguascalientes tiene una recarga anual de 290 millones de metros cúbicos, lo que habla de una sobre explotación de 52 por ciento; con ese ritmo, las aguas freáticas caen tres metros en promedio por año, por lo que cada vez se tiene que perforar a mayor profundidad.
La extracción se lleva a cabo a través de perforaciones profundas en cinco valles: el de Aguascalientes, Venaderos, Calvillo, Chicalote y los Llanos.
La pona!