Colegio de Estudios Estratégicos y Geopolíticos de Aguascalientes, A.C.
Moscú, Federación Rusa. 27 de febrero de 2018. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, exhorta los grupos opositores al Gobierno sirio a que cumplan las demandas de las Naciones Unidas (ONU) respecto al alto al fuego. El hombre de la expresión ajada, parecida a la de un mastín napolitano, dice que la oposición continúa bombardeando Damasco y que “ellos deben hacerse responsables” y “cumplir con las demandas del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.
Su contraparte francesa, Jean-Yves Le Drian, comenta que los opositores han enviado una carta a la ONU asegurando que cumplirán con el cese de hostilidades. Tras escuchar con respeto al diplomático galo, Lavrov se muestra escéptico y dice: “Ya veremos cómo será implementado en la práctica”.
La escena arriba mencionada se relaciona con el presente artículo, el cual tiene por objetivo explicar cuál es la importancia de los combates que se libran en torno a Guta Oriental, Siria.
Siria, “versión levantina de Yugoslavia” (Robert D. Kaplan dixit), comenzó su desintegración, en la primavera de 2011, cuando grupos opositores -sufragados por Arabia Saudita, los Estados Unidos, Francia, Israel, Qatar, Reino Unido y Turquía- se levantaron en armas contra el presidente Bachar al-Assad, quien fue apuntalado por Irán y Rusia.
En el estío de 2015, las fuerzas de al-Assad se encontraban al borde de la derrota y fue en ese momento cuando entró en acción la Deus ex machina iraní: el general de la Guardia Revolucionaria, Qasem Soleimani, viajó a Moscú para convencer a Vladimir Putin de que sólo una acción conjunta de Irán y Rusia podría salvar a al-Assad.
El concurso de las fuerzas aeronavales y asesores militares rusos más la participación de miles de milicianos chiíes provenientes de Afganistán, Irak, El Líbano y Pakistán cambiaron la marea de la guerra. La liberación de Alepo, Palmira y Deir ez-Zor fueron hitos en la contienda librada contra las hordas de fanáticos musulmanes pagados por los enemigos de al-Assad.
El inicio del año 2018 atestiguó el aumento de la temperatura entre dos parejas de acérrimos rivales: Irán e Israel, por una parte, y la Unión Americana y la Federación Rusa, por otra. Afortunadamente, Rusia realizó malabares diplomáticos, los cuales evitaron una mayor conflagración en Levante.
Sin embargo, uno de los pocos bastiones en poder de los extremistas musulmanes es Guta Oriental: una zona agrícola, famosa por su producción de: alfalfa, algodón, cebada, ciruelas y trigo. Esta franja marca el límite entre la capital de Siria, Damasco, y el desolado e inhóspito desierto.
Para eliminar este bolsón, Rusia desplegó su más avanzado avión de combate: el Su-57. El caza de quinta generación recibirá su bautismo de fuego en Siria. ¿Por qué? Los rusos desean poner a prueba el radar y sistemas de guerra electrónica de la precitada aeronave. Asimismo, el uso de los Su-57 busca dos objetivos: “contener a Turquía” ahora que el Ejército Árabe Sirio, leal a Bachar al-Assad ha entrado en Afrin y “reforzar a la fuerza área rusa”1 que opera en la zona.
El analista militar Víktor Baranets considera que el despliegue es correcto pues “la guerra es el examinador más estricto para cualquier arma. La decisión rusa de poner a prueba sus armas en la lucha antiterrorista es más que correcta”2.
El envío del Su-57, apodado “el ojo que todo lo ve”, no pasó inadvertido para el eficiente servicio secreto israelí, el Mossad, el cual filtró fotos tomadas vía satélite de los aeroplanos en la base aérea de Jmeimim, Siria.
Ante el masivo asalto aéreo ruso, la jauría mediática, obediente a los dictados de Washington y Londres, ha catalogado como “criminales de guerra” a los pilotos rusos. Para evitar el fastidio de los anglosajones, Putin accedió a una tregua diaria, la cual tendrá una duración de 5 horas y permitirá la salida de los civiles.
¿Por qué es importante la batalla por Guta Oriental? El siguiente cuadro lo explica:
Importancia de la batalla por Guta Oriental
EXPERTO | COMENTARIOS |
Serge Marchand
Perito francés en asuntos internacionales |
– Rusia busca destruir al Yesh al-Isam (“El Ejército del Islam”) armado por Arabia Saudita, a través de Jordania, el cual “recibe orientaciones de las SAS (fuerzas especiales británicas) y de oficiales de la DGSE francesa (Inteligencia para el exterior)”. |
Alexander Mercouris
Abogado británico, experto en asuntos internacionales |
– Rusia, junto con Irán y Siria, busca encajonar a los extremistas islámicos “en áreas remotas y empobrecidas de Siria” |
Fuente: elaborado por el autor con datos de: Red Voltaire y The Duran
Asimismo, dos hechos le dan relevancia la batalla por Guta Oriental: Vladimir Putin desea presentar una victoria al pueblo ruso antes de las elecciones del 18 de marzo; y el mandatario ruso pretende asegurar el triunfo en Siria, lo cual es esencial en su designio de “deshacer al petrodólar”, pues “Putin juega ajedrez. Él sabe que, moviendo las piezas correctas en Siria, puede influenciar los mercados energéticos”3 en el ámbito global.
Todo ello, estimado lector, explica el diluvio de fuego que se cierne sobre Guta Oriental y los ríos de saliva y tinta derramados sobre la batalla en cuestión.
Aide-Mémoire. De acuerdo a los protocolos internacionales, izar la bandera al revés significa elevar una protesta; pedir auxilio o indicar la rendición de una guarnición.
- Russia, U.S. could be headed for collision in Syria https://goo.gl/EQ4srJ
- ¿Cuál es la razón del envío de los cazas Su-57 a Siria? https://goo.gl/eQcKJB
- Katusa, Marin. The Colder War: How the Global Energy Trade Slipped from America´s Grasp. Hoboken, Wiley, 2015, p. 143 y 175