- Se exhorta a la población a registrarse como posibles donantes, debido a la complicación de compatibilidad con los posibles receptores
- En Aguascalientes, con este registro, se han logrado cuatro donadores que han llegado hasta el final del procedimiento
La compatibilidad entre un receptor y un donador de médula ósea es muy difícil, ya que dependiendo del grupo étnico se llegan a encontrar con genética igual uno de cada 10 mil o hasta 100 mil posibles donantes; por ello la importancia de que se incrementé el número de voluntarios que quieran ofrecer una parte de este tejido para salvar otra vida; resaltó Rebeca Ceballos Salazar, integrante del Centro de Captación de Donadores No Relacionados de Médula Ósea.
Si bien reconoció que las probabilidades de compatibilidad son muy bajas, si se llega a lograr es de gran satisfacción ayudar a salvar una vida; indicó que en más de una década de conformación de este registro, se han logrado cuatro donadores que han llegado hasta el final del procedimiento; “ellos hicieron todo su procedimiento, fueron compatibles y cuando se les solicitó hacer la donación la llevaron a cabo; eso nos da una gran satisfacción, pero sabemos que no es suficiente”.
Precisó que en Aguascalientes, a la fecha, se tienen dados de alta más de mil probables donadores de este tejido que podría salvar a pacientes con enfermedades oncológicas como leucemia, linfoma y mieloma múltiple.
Aseguró que basta con tener la voluntad de donar para hacer la diferencia en una persona, “una vida se puede salvar con tal sólo dar un poquito de ti”. Explicó que es un registro que a nivel nacional se realiza, en el que se está invitando a la población en general a que se adhiera para poder ser un donador, para personas que requieren trasplante de médula ósea; los requisitos es tener entre 18 y 60 años de edad, estado de salud bueno, y que no hayan tenido hepatitis C o enfermedades autoinmunes.
Ceballos Salazar destacó que este tejido que se encuentra en la cavidad de los huesos y que se encarga de producir todas las células de la sangre, se regenera constantemente por lo cual la persona que desee donar parte de su médula ósea no debe temer por su salud o complicaciones tras compartirlo con el paciente enfermo de cáncer, ya que en su caso se recuperará en pocos días.
Detalló que hay dos maneras de donar médula, una es succionarla del hueso largo, como la pelvis, en donde se requiere anestesia local; la otra es mediante un procedimiento que se llama plasmaféresis, en la que al donador se les administra un medicamento, que es un factor estimulante de colonias, mismo que le va a permitir que movilice las células madre hematopoyéticas a la circulación; “una vez ahí se le hace el procedimiento de aféresis, que es similar a una donación de sangre”, puntualizó.