- En una verdadera democracia no se debería imponer una Ley que perjudicará al mismo pueblo
- La ciudadanía deberá de gritar más fuerte en contra de esta ley, al no poder confiar en los políticos
Los legisladores federales no escuchan la voz del pueblo, por eso fue necesario que Miguel Álvarez Gándara, ganador del Premio Nacional de los Derechos Humanos 2017, pidiera al Senado de la República no aprobar la Ley de Seguridad Interior, por eso la sociedad civil tendrá que gritar aún más fuerte.
Así lo señaló Marcela Martínez Roaro, presidente del Centro de Capacitación y Desarrollo Comunitario A. C. (Cecadec), quien cuestionó el ejercicio de una verdadera democracia, cuando en el país se quiere imponer una ley que a todas luces daña a la misma ciudadanía, misma que no ha dejado de clamar para que no sea aprobada.
Recordó que el 8 de diciembre, Álvarez Gándara, luego de recibir el premio máximo para los defensores de los derechos humanos en el país, llamó al Senado de la República a no aprobar la Ley de Seguridad Interior y pidió que no se cierren al diálogo, privilegiando el enfoque de la paz sobre el de la guerra. Hace cinco días el presidente Enrique Peña Nieto pidió a los senadores ampliar el debate con las organizaciones civiles a fin de enriquecerla, lo que puso una pausa a la aprobación.
“¿Cuál democracia, si el pueblo les grita, les echa en la cara lo que quiere y no escuchan?, para ellos fue más fuerte la voz del presidente, luego de que Álvarez Gándara tuvo la oportunidad de hacerse oír desde ese foro de gran magnitud, y pedir que escuchen al pueblo, no quiere esa ley y no la quiere porque no somos tontos”, manifestó la activista, quien consideró que actualmente en México la ciudadanía está cada vez más informada.
Expuso que la gente cada vez tiene mayor interés en informarse de varios temas, y si bien no son expertos en seguridad pública, sí se enteran, perciben o sufren personalmente que alguien murió o se vio afectado en su patrimonio como consecuencia del delito, y a pesar de que el ejército ya salió a las calles desde hace 30 años las cosas no cambian.
¿Qué se necesita para que entiendan que están en un error?, no sé cómo habrá de ser, pero para eso les pagamos, para que indaguen y fundamenten las mejores decisiones para todos; sólo sabemos que así nos deben ser”, expuso Martínez Roaro.
Ante este contexto, consideró importante y necesario que la ciudadanía deberá de emprender acciones más enérgicas y efectivas, “sin llegar a la violencia”, aclaró; ya que a los partidos políticos no les otorga la confianza para apelar por el bien del pueblo, por ello deberá ser la misma sociedad la que se haga escuchar, pues las víctimas mortales han sido demasiadas a lo largo de estos 30 años.