- Jorge Ibáñez fue reconocido por su trabajo en química en microescala, con el cual obtiene procesos más limpios
- La química a microescala es de las más sustentables al generar menos contaminantes, empleando recursos renovables o sustancias amigables con el medio ambiente
Jorge Ibáñez Cornejo, investigador de la Universidad Iberoamericana, fue galardonado con el Premio Internacional de Química en Microescala 2017, en una ceremonia realizada el 7 de agosto en el campus Kawauchi de la Universidad Tohoku, sede del noveno Simposio Internacional de Química en Microescala.
Ibáñez ha desarrollado procesos más eficientes para el desarrollo de química a microescala, la cual emplea mínimos insumos para la realización de experimentos de laboratorio, en lugar de las cantidades empleadas regularmente. “Esto permite ‘miniaturizar’ procesos y generar menos contaminantes, además que permite llevarlos a cabo en las aulas universitarias”.
El investigador se inició en esta área de la química hace 30 años con un enfoque “verde”, es decir, en vez de hacer investigación y docencia con grandes cantidades la disminuye, pero no a nivel de microscopio, sino observable a simple vista.
“Si bien entre los principales objetivos de la química a microescala se encuentra el ahorro de sustancias que se extraen en el planeta, también busca la generación de menos desechos y mayor seguridad para docentes y académicos, puesto que a escala pequeña los riesgos en los laboratorios son menores. También disminuimos el tiempo de las reacciones, con lo que podemos hacer más en el mismo lapso; además, reducimos costos y espacios de almacenamiento”.
El científico mencionó que la química a microescala es de las más sustentables que se pueden alcanzar al generar menos contaminantes, a la vez que se utilizan recursos renovables o sustancias amigables con el medio ambiente.
Ibáñez Cornejo -académico del Departamento de Ingeniería y Ciencias Químicas de la Universidad Iberoamericana- explicó que la química a microescala ha tenido mucho éxito en los laboratorios de enseñanza, los retos que se mantiene es buscar procesos cada vez más sustentables. Donde el panorama es más complejo, dijo, es en el sector industrial, puesto que para las empresas es un gran reto mejorar la eficiencia, seguridad y sustentabilidad en sus procesos.
“Pensemos que requieren hacer una reacción en un reactor de mil litros, por ejemplo, ¿qué tal si en vez de hacer el proceso común, lo hacemos mejor en un millón de reactores de un mililitro? La reacción será más fácil de controlar para así disminuir riesgos, puesto que se monitorea de manera más sencilla lo que sucede y la eficiencia es mejor”.
Pero además hay otro tipo de fenómenos que ocurren en los microrreactores que no suceden en los de mayor tamaño, como el efecto de capilaridad, que es el manejo de la viscosidad. “Un reto importante para las empresas es miniaturizar sus procesos con una salida de volumen igual a la que realizan con los métodos comunes”.
En los laboratorios de enseñanza, el científico mencionó que han impactado a más de mil instituciones en México, donde han colaborado con grupos académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto Politécnico Nacional y la Universidad de las Américas, entre otras. También han logrado llegar a muchas instituciones de diferentes países mediante una red creada con ese propósito. El grupo académico del especialista ha brindado amplia difusión a este trabajo mediante la publicación de siete libros y alrededor de 50 artículos en revistas.
En la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, Ibáñez fundó en 1990, junto con otros académicos, el Centro Mexicano de Química Verde y Microescala. Fue director del Departamento de Ingeniería y Ciencias Químicas y coordinador departamental de investigación. Ha obtenido entre otros premios el Nacional de Electroquímica (2015), Premio de la American Chemical Society por la Incorporación de la Sustentabilidad en la Enseñanza (2010), Premio Nacional de Química Andrés Manuel del Río (1998) y Premio a la Enseñanza en la Universidad de Houston (1980 y 1978).
Jorge Ibáñez Cornejo recibió el premio de manos de Kazuko Ogino, profesora emérita de la Universidad Tohoku y presidenta del Comité Organizador del noveno Simposio Internacional de Química en Microescala.
Con información del Foro Consultivo, Científico y Tecnológico