Estimado lector, muchas noticias han dado de qué hablar en el sector financiero económico mundial, y algunas, han sido minimizadas sistemáticamente por los medios de comunicación ya que para ellos hay otras noticias que son más importantes.
El presidente de Estados Unidos, el famoso Potus, Donald Trump, cada vez ha dado más muestras de que está desequilibrado mentalmente, o bien, de que tiene alguna enfermedad y la medicina que está tomando lo hace decir, escribir y tratar de hacer cosas que parecen salidas de la ficción política más grotesca.
El último de sus alcances ha sido su “guerra” contra el Huracán Harvey. Cuando este fenómeno meteorológico empezó a atacar con fuerza descomunal el estado de Texas, quiso desviar la atención hacia el mismo dando el indulto presidencial al famoso racista y xenófobo Joe Arpaio. Y después cuando se empezaba a vislumbrar la terrible tragedia en la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos, Houston, empezó a arremeter contra México y el TLCAN. Los medios le dieron más importancia a esto, y Trump, ha minimizado lo más que ha podido al Huracán. Se le ve en las últimas veces que ha estado ante los medios de comunicación, cansado, harto, aburrido. La presidencia no ha sido lo que él esperaba, eso es claro. Acostumbrado a arrebatar, no a negociar, no ha podido cumplir nada de lo que prometió. Es un mentiroso contumaz, y así como Fox, el candidato, ofreció acabar con el conflicto zapatista en nuestro país en quince minutos (ya tenemos 11 años desde que salió Fox y el conflicto sigue vigente), Trump no ha podido ni con el Obamacare, que su mismo partido ha dicho que este mal desde su concepción, pero las opciones de Trump han sido visto como más nefastas.
Veamos la realidad que Trump, y otros no han querido ver estos días, que se ha minimizado o nos hemos malacostumbrado a verlo como normal, pero no tiene nada de normal.
- La tragedia de Houston, no sólo en vidas humanas, sino también económica es catastrófica. Será sin lugar a dudas la reconstrucción más cara de la historia de la humanidad. Las carreteras, calles, negocios, casas, autos que han sido destruidos y sus pérdidas económicas serán inimaginables. El caos que llevará consigo cuando el agua retroceda es casi como el mismo caos cuando acabó la segunda guerra mundial. Y México no estará exento de tener problemas debido a eso. Sin más, mucha de la gasolina que se utiliza y vende en México viene de Texas, y sobre todo de Houston y lugares cercanos. Se avecina una pequeña escasez de gasolina, hay que estar preparados.
- Las bravuconadas del presidente de Corea del Norte. Kim Jong-un es un desequilibrado mental. Su padre es culpable de muchas de las afectaciones mentales de este personaje, pero aunque pensamos que está demasiado loco, la realidad también es que ha ido empujando con sus “pruebas” de misiles balísticos al mundo entero. De hecho, el último misil que sobrevoló Japón era para que hubiera sido destruido antes de que pasará por este país por los misiles antiaéreos que este país tiene. ¿por qué lo dejan tener éxito? ¿tanto miedo le tienen? Es un bully nato, si ve que va ganando y pega y no le hacen nada, seguramente seguirá haciendo pruebas cada vez más fuertes. El mundo peligra… y parece que nadie lo ve.
- El radicalismo islamista. Lo ocurrido en Las Ramblas de Barcelona no es una excepción, es la regla de la nueva “guerra de guerrillas” del siglo XXI. Ciudadanos “normales” que deciden por su fanatismo dar al traste a vidas y la tranquilidad de una comunidad. La reconquista de Europa por parte de los musulmanes radicales es vital. Por eso sus ataques son a Francia, España y otros lugares emblemáticos de este continente. No hay armas masivas para poder detener el embate “hormiga” de ISIS. Se debe pensar diferente, para hacer frente a este ejército.
- La “fortaleza” del peso y la “estabilidad” en México en cuanto a las finanzas se refiere. El peso ha mantenido una fortaleza ante el dólar que es sorpresiva. Pero si analizamos que la tasa de interés que paga el país es muy superior a la de otros, los capitales “golondrinos” han venido a ganar esos intereses. La estabilidad que tanto manejan es ficticia, la inflación se está desbocando, ya que si bien es cierto está cerca del siete por ciento según datos del Inegi, la verdad es que hay regiones donde esta inflación es superior al quince por ciento. Muchos niños regresaron a clase, pero con menos útiles o a otro colegio o escuela que pidiera menos requisitos porque sus padres no tienen el dinero que les alcance para eso.
En fin, parece que estamos como dirían en el campo antes de que llegue la gran tormenta disfrutando una “calma chicha”, esperemos que la tormenta solo sea una llovizna y que el Huracán Trump se debilite.