- Durante el eclipse, sí pesaremos menos, pero el peso restado será el equivalente al de una cucharada de azúcar
- Un eclipse solar es la desaparición temporal a la vista del Sol desde la perspectiva de la Tierra y que es causada por la alineación del Sol, la Luna y la Tierra
Los eclipses han estado rodeados de mitos y supersticiones. Por ejemplo, hace cientos de años, los chinos creían que durante los eclipses solares el Sol era devorado por un dragón; o los mayas que creían que al desaparecer el sol, criaturas malignas surgían de la oscuridad.
La palabra eclipse viene del griego ekleipsis, que significa desaparición, y hoy en día sabemos que los eclipses se producen cuando un cuerpo celeste se interpone entre otros dos, proyectando una sombra.
Hoy 21 de agosto sucederá un evento astronómico que en la actualidad, con el avance de la ciencia, podría considerarse común, aunque no muchos han tenido la fortuna de presenciar. Se trata de un eclipse solar que ocurrirá sobre toda América con mayor intensidad sobre Estados Unidos; un eclipse total que ocasionará que el cielo se oscurezca durante el día. En México esto se observará solamente de manera parcial.
Un eclipse solar es la desaparición temporal a la vista del Sol desde la perspectiva de la Tierra y que es causada por la alineación del Sol, la Luna y la Tierra, explicó la doctora e investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Gloria Delgado Inglada.
Como consecuencia de la traslación y rotación de la Tierra y la Luna, cada cierto periodo de años coincide que la Luna se coloca entre el Sol y la Tierra, lo que genera una sombra sobre el planeta y se denomina como un eclipse. Durante los eclipses totales, el sol es cubierto por la luna, pero aún es posible observar la corona solar o la atmósfera del Sol, lo que provoca un anillo iluminado con centro totalmente negro.
Otro efecto visual que se genera durante estos eventos es la similitud entre el tamaño del Sol y la Luna, aunque en realidad la diferencia entre ambos respecto a sus dimensiones y en distancia con la Tierra es de 400 veces más en ambos casos por parte del Sol, agregó la científica.
Existe otro tipo de eclipses que son los llamados eclipses lunares ocurridos por el paso de la Tierra entre el Sol y la Luna que produce una sombra sobre el satélite natural del planeta. Dependiendo de la fracción de Sol o Luna que se oscurece es que se les denomina como eclipse total, parcial o anular.
Desde dónde ver el eclipse
Los eclipses son sucesos que se repiten en todo el planeta incluso sobre el océano. En esta ocasión, el eclipse solar sólo será visible en zonas donde sea de día. “Durante cada eclipse solar, hay una delgada franja de territorio que podrá ver el eclipse total y una porción más grande que verá el eclipse de forma parcial”, añadió.
Dicha franja que compone el paso del Sol durante el eclipse está conformada por 14 estados o 70 millas de forma diagonal en el territorio de Estados Unidos, explica así la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA).
El territorio mexicano no tendrá un oscurecimiento de cien por ciento, pero sí lo presenciará de forma parcial. En ciudades del centro y sur del país como Oaxaca, Chiapas o Ciudad de México, se apreciará en un porcentaje de 20 a 25 por ciento, mientras que en estados del norte como Baja California, Sonora, Chihuahua o Coahuila, esto llegará hasta un 60 por ciento, aseguró Gloria Delgado.
El significado de estos eventos es mera coincidencia entre la mecánica y movimiento del sistema solar, la última vez que Estados Unidos presenció un evento similar fue en 1918, hace 99 años.
En esta ocasión, la NASA ha decidido aprovechar al máximo las tecnologías actuales y transmitir a lo largo de Estados Unidos y todo el mundo cómo se observará en su máximo. Para esto, los astronautas de la Estación Espacial Internacional, once naves espaciales que se encuentran orbitando la Tierra y más de 50 globos estratosféricos equipados con cámaras registrarán el antes, durante y después del eclipse solar.
Proteger la vista
Astrónomos amateurs y profesionales -como la doctora Gloria Delgado- afirman que aunque el Sol quede parcialmente oculto por la Luna, la luz que llega a los ojos es muy intensa y puede quemar la retina. De la misma forma que ocurre con los telescopios o binoculares.
Para evitar esto, se recomienda usar filtros solares especiales para instrumentos de observación o mediante métodos indirectos. Los lentes oscuros o filtros caseros no son útiles en este caso.
Dentro de la franja de totalidad que pasará sobre Estados Unidos, será posible observar sin protección durante el periodo máximo del eclipse que tiene duración de dos minutos dependiendo la ubicación; sin embargo, mantener la seguridad de los ojos es altamente considerable.
Observar el eclipse a través de telescopios con filtro en la Ciudad de México es posible y de forma gratuita en el Instituto de Astronomía de la UNAM donde, además de recibir una transmisión directa desde el Observatorio Astronómico Nacional en Ensenada, Baja California, se realizarán conferencias sobre el tema por parte de los investigadores de la universidad. También Universum, Museo de las Ciencias planea estas actividades al igual que el Planetario Luis Enrique Erro del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
México podrá experimentar este fenómeno natural de eclipse solar total el 8 de abril de 2024, cuya franja de totalidad pasará sobre el norte del país como Mazatlán y Torreón, explicó Gloria Delgado Inglada.
¿Qué ocurre durante los eclipses? (mitos y verdades)
Desde días pasados, en redes sociales han circulado rumores que aseguran que durante los eclipses, las personas pesamos menos. Esto tiene algo de cierto, pues la acción gravitacional que se produce cuando se alinean la Luna y el Sol ocasiona una pequeña alteración en la gravedad terrestre.
“Cuando se produce un eclipse, el Sol y la Luna están alineados, por lo que la acción gravitacional de estos dos cuerpos se suma, contrarrestando un poco la acción gravitacional que ejerce la Tierra sobre todos los cuerpos que están sobre ella”, explicó José Ramón Valdés, doctor en astrofísica y actual investigador del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (Inaoe).
Si bien la acción gravitacional de nuestro planeta sufre cambios, estos efectos son prácticamente imperceptibles para el ser humano. Durante el eclipse, sí pesaremos menos, pero el peso restado será el equivalente al de una cucharada de azúcar.
Esta alineación entre nuestra estrella y el satélite natural de la Tierra también influye en los mares, ocasionando mareas ligeramente superiores a las habituales, pero sin llegar a provocar cambios catastróficos.
¿En qué ayudará el eclipse?
En los lugares donde el eclipse puede apreciarse en su totalidad, la naturaleza reaccionará a causa de la falta de luz, presentando una oportunidad única para los investigadores que estudian el comportamiento de flora y fauna durante los casi tres minutos que durará el fenómeno.
También se presentan condiciones favorables para el estudio de las capas superiores de la atmósfera del Sol.
“Cuando vemos el Sol, lo que observamos es la capa más interna de la atmósfera del Sol, la fotósfera. Por encima de ella hay otras dos capas, la cromósfera y la corona solar, capas que no se pueden ver ya que su densidad es muy baja (…). Es como si pusiéramos un cerillo delante de una fogata”, puntualizó el doctor Valdés.
Durante el eclipse total de Sol, la Luna cubre completamente la fotósfera, haciendo que la cromósfera y la corona solar puedan ser observadas. Esta oportunidad es aprovechada para estudiar más a fondo estas capas, pues hay fenómenos que requieren explicación.
Las cuestiones de las que se quiere saber más sobre el Sol, es el porqué de las altas temperaturas de la cromósfera y la corona solar, que pueden llegar a tener temperaturas de aproximadamente un millón de grados Celsius, mientras que su superficie alcanza apenas seis mil grados.
Para resolver la incógnita, se planea estudiar la distribución de los electrones en la cromósfera y en la corona solar, de manera que sea posible realizar modelos que ayuden a explicar sus altas temperaturas, además de estudiar la estructura del campo magnético presente en las capas mencionadas.
Con información del Conacyt