- El catedrático de la UAA, Salvador de León Vázquez, aseguró que pese a que no se vive la violencia de otros estados Aguascalientes podría estar mejor
- En el país, cada mes que ha pasado en 2017, un periodista ha sido asesinado
Aunque se asume que en Aguascalientes la labor periodística se realiza en condiciones de menor peligrosidad que en algunas partes del país, según el catedrático de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) en el estado existen condiciones que no son deseables y que interrumpen la libertad del oficio periodístico que son impuestas incluso por las mismas empresas de comunicación según el catedrático Salvador de León Vázquez.
El día de ayer, la UAA presentó la convocatoria para el Premio Nacional de Periodismo 2017, en la presentación estuvo el catedrático e investigador del Departamento de Comunicación, De León Vázquez.
Tras la presentación, se le cuestionó sobre las condiciones en las que se ejerce el periodismo en México, con lo que aseguró que el país continúa siendo uno donde resulta más peligroso dedicarse a esta labor; apenas en 2017, cada mes que ha transcurrido un periodista ha sido asesinado.
Ante las amenazas que sufren los periodistas, lamentó, no hay confianza en las autoridades pues no hay eficacia resolutiva, “Los propios datos de la fiscalía son muy contundentes y evidentes y las medidas cautelares que se toman son terribles”.
Lo más lamentable es que en la mayoría de los casos son las propias autoridades que deberían proteger el trabajo de los periodistas son las que se encargan de reprimir a los periodistas, por ejemplo un documento de la organización no gubernamental internacional Artículo 19, señala que más de la mitad de las agresiones a periodistas son cometidas por el estado a través de sus agentes.
Ante ello se debe reflexionar sobre la necesidad de ofrecer medidas mejores, más eficientes y más eficaces para la protección de los periodistas pues pese a que ya existen leyes para protegerlos como la Ley General de Protección a Periodistas y Defensores de los Derechos Humanos, cuando un periodista solicita la atención de las autoridades porque está siendo amenazado se tiene que reunir un consejo y tienen que pasar 72 horas para que pueda recibir atención.
Si bien el periodismo en Aguascalientes no se presenta en un contexto tan trágico como en otros lugares del país, sí se tienen malas experiencias para contar como el caso de los dos reporteros que fueron enviados al penal federal de Ciudad Juárez, Chihuahua, a quienes tiempo después se dejó en libertad por la demostración de su inocencia.
Además las condiciones en las que trabajan los periodistas en sus medios en Aguascalientes no son las mejores, pues viven violencia estructural al aceptar órdenes de trabajo que van en contra de su propia conciencia ya que no existe una cláusula de conciencia o una figura jurídica que le permita al periodista defenderse. Los convenios de publicidad que realizan los medios de comunicación con el gobierno comprometen bastante el ejercicio del periodismo, a partir de las propias normas periodísticas se acepta la censura de manera inconsciente.