Usualmente, desde 1974 se preparaban con bombo y platillo las conmemoraciones del 19 de junio como la fecha fundacional de la Universidad Autónoma de Aguascalientes. En años recientes se adelgazó el antes fastuoso acontecimiento; en 2016 no se hizo anuncio previo alguno, pero sí apareció, el día 20 de junio, una nota periodística de la modesta celebración realizada el día anterior.
En la edición del presente año, descrita en el sencillo boletín publicado en la prensa del día de ayer, hubo una novedad medular. No se habló del aniversario de la fundación de la UAA, sino del “44 aniversario de la aprobación del proyecto de fundación de la UAA.”
Después del error que se cometió durante 43 años al celebrar una fecha apócrifa como el nacimiento de la institución para desviar la atención de la fecha real, el contenido del boletín del día de ayer significa un reconocimiento implícito que seguramente no fue fácil de admitir, lo cual constituye un acto de integridad; ésta y otras medidas positivas aplicadas por la nueva rectoría en el terreno académico son signos alentadores para el futuro de la Universidad.
La fecha real o verdad histórica es la siguiente:
La Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Aguascalientes aprobada por el Congreso del Estado fue remitida con las firmas de los ciudadanos diputados Químico Teodoro Martín González (presidente) y Miguel González Hernández (secretario), al ciudadano gobernador constitucional del Estado Francisco Guel Jiménez, quien después de plasmar la suya instruyó al ciudadano secretario general de gobierno Miguel G. Aguayo para que, convalidada también con su firma, la enviara al periódico oficial -órgano del gobierno constitucional del Estado- para que entrara en vigor mediante su publicación en el suplemento al número 8 del tomo XXXVII correspondiente al Domingo 24 de Febrero de 1974.
Con esto debiera quedar totalmente clara en la mente de cualquier persona, que la fecha en que deben celebrarse los aniversarios de la UAA es el 24 de Febrero y no el 19 de Junio.
Pero también es necesario precisar que el artículo 1 de la propia Ley dice: El Instituto Autónomo de Ciencias y Tecnología de Aguascalientes, se transforma en la Universidad Autónoma de Aguascalientes.
Por tanto, no se trata de una fundación sino de una transformación, porque la UAA no surgió de la nada y su historia no es tan breve ni tan simple. Su fundación se remonta al 25 de Enero de 1849, cuando Jesús Terán presidió la inauguración del Instituto de Ciencias como culminación de las tesoneras gestiones que el grupo liberal realizó durante años para superar los medievales programas de estudios del Colegio de Aguascalientes y les permitiera entrar de lleno en la modernidad científica de la enseñanza.
A pesar de las interrupciones provocadas por la intervención francesa y la revolución mexicana, el Instituto resurgió como tal y así se mantuvo hasta el 24 de febrero de 1974, en que su categoría fue elevada a la de Universidad mediante la promulgación de la Ley citada. Esta, repito, es la verdad histórica.
No sé si para ello haya contribuido la insistencia con la que he machacado este asunto desde hace cuatro décadas, pero da lo mismo; lo importante es que sea esa verdad histórica la que prevalezca.
Por otra parte, la confusión que propaganda mal intencionada ha provocado en las nuevas generaciones en el sentido de que el gobernador Guel Jiménez se opuso a la transformación del Instituto de Ciencias en Universidad, debe ser extirpada pues es una mentira que afecta la dignidad de la Institución.
El Dr. Guel no solo firmó con plena satisfacción la Ley Orgánica que transformó al Instituto en Universidad porque con ello culminaba su más anhelado sueño, apoyándola decididamente en muchos aspectos, entre otros el económico, pues del 133% con que se incrementó el subsidio en el sexenio del gobernador Enrique Olivares Santana pasó al 286% en el de Francisco Guel Jiménez.
Damos nuestra enhorabuena a la decisión de la rectoría y deseamos que mantenga firme el curso.
“Por la unidad en la diversidad”
Aguascalientes, México, América Latina
* Netzahualcóyotl Aguilera Ruiz Esparza es profesor de la Universidad Autónoma de Aguascalientes destituido de todas sus cátedras por sus “fundadores”, por el hecho de haber pronunciado un discurso en defensa de su autonomía. Otros profesores y estudiantes también fueron expulsados de su seno en el ambiente de represión, históricamente imborrable, que manchó su inicio y posterior desarrollo.