- Entregan el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes a Renato Tinajero
- El jurado reconoció en Fábulas e historias de estrategas un libro de gran precisión formal y de extraña belleza
Hemos venido a celebrar a las palabras que llaman a vivir, hacen brotar la verdad y la claridad cuando hacen falta, indicó José Renato Tinajero Mallozzi, a quien le fue entregado el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes 2017 por su libro Fábulas e historias de estrategas, en una ceremonia realizada en el Patio de las Jacarandas.
La poesía permite entender el mundo, indicó Claudia Santa-Ana, directora del Instituto Cultural de Aguascalientes, la poesía es un oficio que toma pedazos de la realidad para resignificarlos y construir con ello otros universos estéticos, oficio del que refirió requiere entender el mundo y tener la habilidad para poder reconstruirlo de manera bella, terrible o ambas. “Celebramos a la poesía, porque es esa oportunidad creadora en la que nosotras y nosotros nos podemos resignificar. En este sentido, la magia de la poesía no debería congelarse en el alto nicho de ‘las bellas artes’, sino que es nuestro deber difundirla popularmente”. La titular del ICA indicó que en esta edición no sólo se celebra a la literatura, sino a la vocación de Aguascalientes por las letras y las artes, a la consolidación de un premio que se erige como el galardón más importante en la poesía en el ámbito nacional, y con referencia a que la ceremonia no se realizó en el Teatro Morelos, a diferencia de años anteriores, con la intención de que la cultura ocupe el espacio público.
En su intervención, Mauricio Montiel Figueiras destacó la labor realizada por el jurado integrado por Minerva Margarita Villarreal, Javier Acosta y Jorge Esquinca, quienes decidieron por unanimidad otorgar el reconocimiento a Fábulas e Historias de Estrategas, sobre el cual señaló el coordinador nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) que era un poemario construido mediante una sofisticada arquitectura, un poema filosófico en la tradición de Sor Juana Inés de la Cruz, Muerte sin fin de José Gorostiza y Canto a un dios mineral de Jorge Cuesta.
A nombre del jurado, Jorge Esquinca dio a conocer el acta de en la que se indica que el poemario de Renato Tinajero fue reconocido por ser un libro de gran precisión formal y de extraña belleza, que mediante la apropiación de una metáfora, el juego de ajedrez, consigue crear un discurso poético complejo, compuesto por diversas capas de sentido donde se expone la relación del individuo frente a la maquinaria del poder a través de un desplazamiento del lenguaje que a su vez potencia y expande una visión enigmática del encuentro del ser humano con el todo, la vida como una partida en la que se empata el vínculo con la materia, el sueño, el plano metafísico y la resolución del vacío, siempre pendiente de la responsabilidad de cada movimiento, pues cada acción concreta un acto y cada acto una posibilidad.
En su intervención, Renato Tinajero dijo que los asistentes que la ceremonia de premiación era ocasión para celebrar a la palabra, “¿pero qué palabras son estas que hoy merecen nuestro festejo, la poeta polaca Wislawa Szymborska escribió este verso: No todas las palabras condenan a muerte, las palabras, como bien nos lo recuerda Wislawa, pueden destruir, una palabra pronunciada con voluntad de odio, con el deseo de dañar y destrozar, con irresponsabilidad, nos aniquila, los significados se tornan ambiguos y sesgados, señorea la confusión que sólo conviene a unos cuantos, son palabras que condenan a muerte, en lugar de volver habitable y transparente el mundo, que para eso se inventaron las palabras, lo llenan de suspicacias, matan las buenas intenciones y nos obligan a mantenernos a la defensiva, abren el paso a la calumnia y el linchamiento, a la mentira y su hermana menor: la verdad a medias, hay personas, lo comprobamos cotidianamente con la mayor tristeza, que no conciben otros usos más que esos para las palabras, y pretenden hacernos creer que esos son los únicos usos posibles, palabras para anonadar y sojuzgar, para esconder lo que debería estar a la luz, palabras cuyo significado mudan según las circunstancias, quieren hacernos creer que no hay alternativa, business are business nos dicen, y que más vale que nos acostumbremos a la real politik, al mundo real”.
“Pero esas no son las palabras que hemos venido a celebrar, no todas las palabras condenan a muerte, hay palabras que no condenan, o que sí condenan, pero condenan a la vida, llaman a vivir, hacen brotar la verdad y la claridad cuando hacen falta, los humanos, extraños como somos, estamos muy dispuestos a destruirnos mutuamente, pero también experimentamos una necesidad imperiosa, apremiante, de verdad, pocas cosas nos iluminan tanto, abren más nuestro horizonte y nos dan tanta salud como la verdad, verdad y los significados con los cuales decidamos representar nuestro mundo; en este gran esfuerzo por devolver al mundo su claridad y arrojar también algo de luz sobre nuestra humana condición, se encuentra la poesía”, señaló el poeta originario de Ciudad Victoria, Tamaulipas.
Tinajero Mallozzi cerró su intervención ofreciendo una definición de lo que proporciona la poesía: “Ante la ambigüedad de los términos, la poesía ofrece claridad y contundencia; ante la voluntad de destrucción, la poesía ofrece la denodada construcción de un discurso, de maneras cada vez más claras, ante la diaria abdicación del lenguaje, con lo cual vamos dejando libre el camino para las mentiras de mañana, ante la ligereza con la cual adoptamos las verdades incompletas y las consignas prefabricadas y vacías, la poesía ofrece el agua clara con la cual podemos saciar nuestra sed, no para endulzarnos los oídos, porque la poesía no siempre es dulce, la dureza, la crueldad y la frialdad también son materias con las cuales se construye el poema; la poesía no está ahí para endulzarnos la existencia, no es un adorno ni un lujo, no es un pasatiempo para aislarnos del mundo, la poesía, la verdadera poesía nos hace encarar las cosas, nos enfrenta con el mundo, desafía nuestras concepciones, las fórmulas con las cuales hemos disfrazado al mundo y nos hemos disfrazado nosotros mismo, la poesía es un aliado mayor de la verdad, las palabras que hemos venido a celebrar aquí, son las palabras de la verdad, queda en nosotros situarnos del lado de la verdad, de la claridad, del significado pleno de las palabras, ojalá que tengamos la voluntad y la fuerza para hacer de nuestra vida un diálogo cotidiano con las palabras, con palabras que nos iluminen, con las cuales construir y construirnos.”
José Renato Tinajero Mallozzi (1976) es el poeta número 50 en recibir el reconocimiento del Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes, el cual consiste en un estímulo económico de 500,000 pesos y la publicación de la obra por parte del INBA, el Instituto Cultural de Aguascalientes y el Fondo de Cultura Económica.