God created war so that Americans would learn geography
Mark Twain
Acotación sobre la elección del verbo
Lidiar y litigar vienen de donde mismo, el latín litigāre, de tal suerte que lidia y litis semánticamente se aparejan. Litigar y lidiar es pelear. Pero litigar se halla en el campo del Derecho, ámbito en el que significa “disputar en juicio sobre algo”. En cambio, lidiar se conjuga usualmente al aire libre, en sombra o bajo el sol: “Enfrentarse a un asunto molesto” y muy especialmente “bregar un torero con el toro”. Efectivamente, el trance que enfrenta el país no debería entenderse como una novillada: no es para aficionados ni para aprendices, y el enemigo no es un morucho. Y, ¡bueno!, qué caso tendría hacer correr tinta aquí hablando de tauromaquia y su simbolismo. Tampoco creo necesario explicitar analogía alguna entre un morlaco y el venático Trump: el tipejo bufa y colige no como sino igual que un astado. Por cierto, antes de la faena se debió haber trasteado un buen rato al bicho, en vez de haber permitido el funambulesco espectáculo de que sea el toro el que esté trasteando al cándido torero…, lo cual me lleva a abrir una:
Oportuna nota sobre el timing
No tenemos un sustantivo en español para el anglicismo timing –tempística, además de horrorosa, es una palabra que nadie usa-. Y aunque su empleo se ha propagado ya lo suficiente como para que nos entendamos, más vale explicitar su significado. El Webster ofrece en su segunda acepción la mejor definición que conozco, la cual procedo a traducir: “capacidad de seleccionar el momento preciso para hacer algo con un efecto óptimo”. Compartido el concepto, digamos enseguida lo evidente: hasta ahora el timing del torero ha sido estrepitosamente malo, con avisos de empeorar. Las embestidas del en su (mala) hora candidato republicano y ahora presidente #45 de Estados Unidos en contra de México han sido puntualmente acogidas por parte del gobierno de Peña “de manera constructiva y respetuosa”, para usar las palabras del canciller que llegó a la SRE a aprender a ser canciller. En general, hemos visto como si tuvieran prisa por recibir zurras y como si les complaciera dejar a voluntad de su azotador que se divulguen. Convendría que se recordara que en esta confrontación el tiempo juega en contra del poderoso, no del débil: Trump es el que lleva apremio, demasiado por lo visto, en cumplir sus estrambóticas promesas, y además es allá del otro lado en donde está volando por los aires toda la cristalería por culpa del paquidermo majareta: Washington has never been this bad, reportó el jueves pasado Stephen Collinson de CNN, en una nota que titula Washington’s new lows (Nuevos mínimos de Washington), y en la que describe cómo “la ira, la división y la disfuncionalidad… definen la era política” que inauguró el ascenso del septuagenario neoyorkino. El desastre que en pocos días ha provocado el megalómano y mega-anómalo mandatario gringo ocurre no sólo tras bambalinas, sino también en el escenario internacional: el viernes, por ejemplo, despertamos con la noticia de que Trump tuvo que echarse para atrás en su amenaza de apoyar a Taiwán, luego de un telefonazo con su homólogo chino Xi Jinping. Tanto hacia dentro como en su relación con el exterior, cada vez irá perdiendo más espacio para su retórica troglodita.
Aclaración sobre la ausencia de sujeto y verbo
Notarán que en la redacción de las siguientes ideas para lidiar con Trump no hay verbos conjugados: empleo sólo participios, esto es, verboides. Me veo forzado a escribir así dada la patente ausencia de sujeto válido. ¿Quién representa a la comunidad imaginaria hasta hoy conocida como México?
- Etiquetar la exigencia por parte de Trump de que México pague el muro que él está empecinado a construir en la frontera como lo que es: una amenaza y una hostilidad internacional.
- Solicitar a la ONU que se pronuncie sobre la amenaza a México por parte del gobierno de Trump relativa al cobro obligado del muro.
- Publicar una carta abierta en los principales periódicos del mundo dirigida a Trump, diciendo que la única forma en la que México pagaría el muro sería por la fuerza. ¿De eso se trata? ¿Está el gobierno de Estados Unidos declarando una guerra México?
- Publicar en los principales periódicos norteamericanos una carta abierta dirigida al pueblo de Estados Unidos refrendando los lazos de amistad.
- Convocar, con carácter de urgente, a una Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, a celebrarse en Los Ángeles, California.
- Condecorar al gobernador del estado de Nueva York, Andrew Mark Cuomo, por su férrea defensa de la diversidad cultural y los derechos humanos.
- Ofrecer asilo humanitario a los hombres y mujeres afectados por la orden ejecutiva del presidente Trump, que prohíbe la entrada a Estados Unidos a los ciudadanos de siete países con población mayoritariamente musulmana.
- Solicitar a la OEA una reunión urgente de mediación entre los gobiernos de Estados Unidos y México.
- Convocar a una Cumbre Latinoamericana y del Caribe a celebrarse en Tijuana, Baja California, cuyo objetivo sea emitir un pronunciamiento conjunto respecto a la política migratoria del presidente Trump.
- Otorgar un reconocimiento especial a Madonna por su discurso en defensa de los derechos de las mujeres.
- Solicitar a la OCDE, al Foro de Davos y al FMI que emitan sendos pronunciamientos públicos sobre las políticas proteccionistas del Trump.
- Mandar a hacer un millón de calcomanías con el emblema Hecho en México, en una imprenta de Chicago, Illinois, pegárselas a sendos baleros de madera y regalarlos allá por las calles.
@gcastroibarra