- Desarrollismo urbano no debe estar por encima del equilibrio ecológico
- “No podemos convertir a las ciudades en selvas de asfalto”: Isidoro Armendáriz.
“El desarrollismo urbano y el desarrollismo económico no pueden estar por encima del equilibrio ecológico”, consideró Isidoro Armendáriz García a propósito de la construcción de un desarrollo inmobiliario de más de diez mil viviendas proyectado en el bosque de Los Cobos.
Para el delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en Aguascalientes: “No podemos, so pretexto del progreso y el desarrollo, iniciar una acción tan agresiva de depredación a la naturaleza, porque el desarrollo urbano tiene que concebir la filosofía de que hay que cuidar la naturaleza, vivir de ella y dejarla vivir también”.
Cabe recordar que a principios de año se inició el trámite para la urbanización de una superficie de 113 hectáreas en un predio aledaño a la reserva ecológica, ubicada en el sur oriente de la ciudad, para la edificación de un enorme fraccionamiento; el sitio también alberga restos de históricos, prehistóricos y paleontológicos.
En opinión del funcionario federal, las dependencias responsables del cuidado del ambiente de los tres ámbitos de gobierno deben ponerse estrictas y exigentes en ese tema, a fin de heredar un entorno saludable a las próximas generaciones. Hasta el momento, el delegado de Sedatu no ha sido convocado a fijar un posicionamiento en torno al proyecto inmobiliario que actualmente se tramita ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat): “Una de nuestras facultades es justamente pugnar por el desarrollo sustentable y la sustentabilidad de las ciudades, sino va contra natura de tratados internacionales como la Cumbre de Río de Janeiro, la Cumbre de París y de muchos otros planteamientos donde México ha sido parte activa”.
–¿Ve usted consecuencias sociales, además de medioambientales?
–Sí. No podemos convertir a las ciudades en selvas de asfalto, las ciudades no pueden estar mecanizadas, automatizadas, sencillamente con la carga del cemento del concreto que materializa. La naturaleza es fundamental. Se tienen que prever tres cosas: cómo producir alimentos orgánicos, establecer una política racional para el uso del agua e inclinarse al uso de biotecnologías o tecnologías verdes, temas que en los próximos 50 o cien años seguramente será los que afecten el entorno del planeta.
La Secretaría del Medio Ambiente del Estado (Smae) informó hace unos días que, sin importar las advertencias de historiadores y ambientalistas, la federación autorizó el cambio de uso de suelo forestal a habitacional en un polígono cercano al bosque de Los Cobos, asegurando que este polígono no se encuentra catalogado reserva natural. Según el titular, Jorge Durán Romo, las obras no afectarán el ecosistema del lugar y las autoridades estatales permanecerán atentas al proceso constructivo.