- La canción es música, pero también literatura, es el punto donde se tocan esas dos cosas
- Dylan no se anda con niñerías y no evita decirte las cosas, ni evita la crueldad, no quiere caer bien
Por primera vez en la historia de los Nobel de Literatura, un músico ha conseguido el premio, la Academia Sueca realizó el anuncio la mañana del 13 de octubre, y destacó que se le concedía a Bob Dylan (Robert Allen Zimmerman, Duluth, Minnesota, Estados Unidos, 24 de mayo de 1941) “por haber creado una nueva expresión poética dentro de la gran tradición americana de la canción”. La filóloga Sara Danius -la primera mujer al frente del jurado que entrega el Premio Nobel de Literatura en los más de dos siglos de historia- declaró que Dylan “puede y debe ser leído, pues encarna a un gran poeta en la tradición literaria anglosajona”.
Con la entrega de este reconocimiento a Bob Dylan la discusión se amplía en distintas vertientes, desde qué estamos considerando literatura hasta la denostación a la figura de Dylan calificándolo sólo como un “escritor de letras” para no reconocerlo como poeta. No ha faltado quien indique que “es un genio, pero no es un poeta” o, en el otro extremo, valore sus cualidades líricas como una cima de la escritura en inglés; en una conferencia en 1965, cuestionado sobre si debería ser considerado un escritor de canciones o un poeta, Dylan contestó: Pienso en mí mismo más como un hombre que canta y baila (I think of myself more as a song-and-dance man).
La respuesta más directa sobre esta “controversia”, está en las notas de su álbum The Freewheelin ‘Bob Dylan (1963), en el que Dylan escribió: “Cualquier cosa que pueda cantar, lo llamo canción. Cualquier cosa que no puedo cantar, lo llamo poema”.
Para aportar a la discusión sobre el merecimiento o no del Nobel de Literatura, entrevistamos a José Manuel Aguilera, compositor, guitarrista, cantante, escritor y líder de La Barranca.
Edilberto Aldán (EA): Si lo que estuviera en discusión es qué es literatura, si es poesía o no lo que escribe Bob Dylan, tú respondes: es poético.
José Manuel Aguilera (JMA): Todo es muy sutil, yo diría que lo poético es una cualidad que no necesariamente está sólo en la poesía, puede estar en cualquier cosa, yo no me considero poeta, para nada, y tampoco creo que Dylan lo sea, creo que somos hacedores de canciones y eso es como un oficio muy específico. La canción es algo que tiene de las dos cosas, está en la frontera, tiene una parte literaria, es un vehículo, una invención; las artes tampoco son mundos estrictamente delimitados, la canción es una invención que cae en una intersección, es música pero también literatura, no es ni lo uno ni lo otro, es el punto donde se tocan esas dos cosas, la posibilidad de unir música con palabras, entonces, ¿es literatura lo de Dylan?, pues sí, porque la canción es literatura.
EA: En ese sentido, ¿te sientes cercano a Dylan?
JMA: Coincido con lo que decías acerca de que Dylan puede ser difícil para los que no son angloparlantes, pero no sólo por eso, la obra de Dylan no es para niños. Todos lo conocemos, es una referencia, pero mucha gente no lo ha oído, yo estaba un poco en ese caso, conocía algunos discos, conocía sus greatest hits, pero Dylan no es eso, yo me reconecté con él, me metí en su mundo, ya mucho tiempo después, en los noventa, cuando estuvo medio a punto de morir y apareció un disco que se llama Time out of mind, en 1997, producido por Daniel Lanois; yo estaba en un antro y pusieron una canción de ese disco y se me hizo una cosa chingonsísima, inmediatamente fui a comprarlo. Siempre es difícil decir cuál es el mejor, pero ese álbum yo lo pongo entre sus tres o cuatro discos esenciales, con ese me reconecté, Dylan es una serie de personajes que ven el mundo y nos lo cuenta a través de ese personaje, el que presenta a partir de Time out of mind es un viejo que está observando, ya con toda la experiencia de lo vivido y tiene como un cierto cinismo, escepticismo, no cree en el amor ya, pero no deja de buscarlo todo el tiempo; hay una rola en particular “Love sick”
I’m sick of love; I wish I’d never met you
I’m sick of love; I’m trying to forget you
Just don’t know what to do
I’d give anything to be with you
Y eso es, el viaje, los contrastes, como a pesar de todo lo que ha dicho sobre el amor, termina diciendo que daría cualquier cosa por estar contigo, y así le da la vuelta.
EA: ¿Es un poeta que se aprecia en la madurez?
JMA: Yo creo que sí, Dylan no se anda con niñerías ni quiere caer bien, y no evita decirte las cosas, ni evita la crueldad, no quiere caer bien.
EA: No es para ingenuos.
JMA: O sea, no hace concesiones, no piensa “a la mejor no le van a entender, le voy a cambiar”, a él le vale y si dice cosas duras o complicadas o rebuscadas, las dice como van, nunca tiene esta actitud paternalista con su público, dice lo que tiene que decir, esa actitud es madura.
EA: Si es difícil, ¿por qué crees que haya tenido éxito?
JMA: Me atrevo a decir algo muy arriesgado, yo creo que porque Dylan inventó el rock, ¿por qué digo una cosa tan rotunda?, porque antes de Dylan el rock era más que nada un ritmo, una sonoridad, pero no decía cosas que necesariamente se metieran en el corazón de la época; cuando Dylan estaba haciendo “Blowin in the wind”, los Beatles estaban haciendo “I want to hold your hand”, por ejemplo, que es una rola chida, pero ¿qué es lo que está diciendo?, o estaban haciendo “She loves you”, mientras que Dylan ya estaba diciendo cosas bien cabronas, creo que a partir de ahí se pensó: esta música que estamos inventando ahora, además le podemos poner una carga lírica que realmente llegue al centro y diga cosas importantes, eso lo hizo Dylan, todo mundo tiene antecedentes, no faltará quien diga que ya había alguien antes, pero como figura global, Bob Dylan fue el que empezó con eso.
EA: De ahí el encuentro con el público, no sólo por la sonoridad, sino por…
JMA: Porque a partir de ahí todos los demás empezaron a pensar de otra manera, Lennon empezó a pensar de otra manera, a escribir de otra manera, Mick Jagger, Leonard Cohen, Procol Harum, Jimi Hendrix, todos comenzaron a pensar de otra manera la música y qué decir. Después de Dylan no podían decir más “I wanna hold your hand” sin parecer infantiles, obsoletos, tenían que empezar a buscar otras cosas, a partir de este contacto con Dylan, la obra de los Beatles cambia radicalmente en muchos sentidos, pero sobre todo líricamente, intentan decir cosas mucho más intensas, profundas.
EA: En estos términos tendríamos que valorar la declaración de la Academia Sueca acerca de la creación de una nueva expresión poética.
JMA: Aclaremos, no en poesía, en letras de canciones. Voy a ser muy relativo, pero ¿qué es el rock?, el rock como lo conocemos, una invención de mediados de los 60, no es nada más una rítmica, no sólo guitarras eléctricas, son muchas cosas pero una de ellas es: decir, revelar, para mí eso es el rock, por eso me atrevo a decir, aunque suene muy rimbombante, que Dylan inventó el rock, no el sonido, no inventó la canción, sino la posibilidad de, esa cosa que antes se llamaba rock & roll, llevarla al terreno literario más arriesgado, más profundo.
La cantidad de canciones que Dylan ha escrito es impresionante, y en ellas hay de todo, ha pasado por todos lados. Él surge del folk gringo y dice que el folk representaba un mundo mejor que la realidad misma porque ahí estaban todas las historias, todas las emociones que a él le interesaban estaban en esas canciones viejas. Dylan comenzó a hacer sus canciones modificando esas rolas tradicionales, ha pasado por todos lados, tuvo ese lado incluso como de protesta y, en muy poco tiempo, pasó por distintas etapas, como cuando se hizo eléctrico, por ejemplo, tuvo una ruptura tremenda con los tradicionalistas y comenzó a hacer unas canciones, te recomiendo que escuches una que se llama “It’s Alright, Ma (I’m Only Bleeding)”, y si eso no te parece poético… bueno, ahí hay una serie de imágenes, de un inglés difícil, que sí, no lo lees a la primera, no entiendes todo lo que dice a la primera, pero lo poético ahí está.