- El salario se ha mantenido estático en los últimos 10 años
- La escalada de precios que se ha dejado sentir como consecuencia de los aumentos a los energéticos y del alza del tipo de cambio orilla a los trabajadores a pedir el ajuste emergente al salario mínimo
La escalada de precios que se ha dejado sentir como consecuencia de los aumentos a los energéticos y del alza del tipo de cambio, orilla a los trabajadores a pedir el ajuste emergente al salario mínimo para incrementar el ingreso y brindar mejores oportunidades de subsistencia, consideró Jesús Enrique Ramírez Pérez, dirigente de la CROM en el estado.
Resulta materialmente imposible subsistir con el actual ingreso que están teniendo los trabajadores debido a que los precios han aumentado de una forma silenciosa mientras que el salario se ha mantenido estático en los últimos diez años.
“Si analizan muy bien el comportamiento del salario en la última década se darán cuenta que los aumentos al salario mínimo han estado en función al cálculo de la inflación, es decir, que la pérdida del poder de compra del salario ha sufrido daños importantes, que obligan a los trabajadores a solicitar que se revise muy bien el impacto que está teniendo las últimas alzas a los precios de productos y servicios con la finalidad de perfilar un aumento al salario.”
Al aumentar la gasolina, el diésel, la energía eléctrica, y soportar un tipo de cambio elevado que subió prácticamente un tercio de su valor en menos de doce meses, han hecho que los productos de consumo básico incrementen su valor.
“No necesitamos ser economistas, las mejores economistas son las amas de casa, son los propios trabajadores que ven cómo cada quincena aumentan los precios y su salario no les alcanza” afirmó el dirigente de la CROM.
Apuntó además que en las últimas tres décadas, el desarrollo del país, las crisis económicas y sus famosas “medicinas amargas” para solucionar el problema económico, “han recaído en la clase trabajadora, porque lo primero que dicen, cuando la inflación va en aumento es que, no se deben aumentar los salarios porque agrava la inflación, entonces son los trabajadores y sus familias los más perjudicados con esta política de freno salarial”.
Con frecuencia se escucha, dijo, a políticos y políticas decir que buscarán que las acciones de gobierno tengan un rostro social; el mejor rostro social que pueden brindar nuestros políticos es que, desde las políticas económicas, privilegien la revalorización del salario; “si tuviéramos en México salarios que alcanzaran para una vida digna, entonces el gobierno se ahorraría los miles y miles de millones de pesos que gasta cada año en sus programas sociales despenseros”.
Pidió mayor sensibilidad de parte de los empresarios en estos meses por venir, a fin de que, de acuerdo a las posibilidades de la empresa, se mejoren los salarios, sin esperar a que sea dictaminado un aumento al salario mínimo.
Con información de la CROM