- Independientemente de su autenticidad, las piezas no son materia de impugnación, asegura Luis Fernando Landeros
- Fiscalía Especial de Delitos Electorales debe investigar la procedencia del material
- No se registraron denuncias por boletas faltantes el día de la contienda
El presidente del consejo general del Instituto Estatal Electoral (IEE) de Aguascalientes, Luis Fernando Landeros Ortiz, afirmó que independientemente de su autenticidad, las dos boletas electorales enviadas de forma anónima a La Jornada Aguascalientes no impactarán en la elección a gobernador, pues no pueden ser utilizadas para impugnar los resultados ya que: “es un delito que se tiene que perseguir”.
Refirió que tanto el robo como la falsificación de los documentos suponen irregularidades que la Fiscalía Especial de Delitos Electorales del Estado -a cargo de Guillermo Rafael Escárcega Álvarez- o bien, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) deben investigar a fondo: “Cualquier reproducción de documentación electoral constituye un delito así como la sustracción, posesión o uso distinto para el que está hecha (…), yo esperaría que la persona que tenga en su poder este tipo de material acuda a la instancia correspondiente”.
–¿Qué pasará si el remitente no presenta la denuncia?
–Estamos frente a un delito, independientemente de que el remitente haya presentado o no la denuncia, es materia de que el fiscal abra una carpeta de investigación y dirima las responsabilidades que cada quien pueda tener (…). Desconozco la praxis, si de oficio los mandara llamar o algo, yo sugeriría como ciudadano, no como presidente del instituto, que presentaran la denuncia y dieran vista, porque evidentemente estamos en presencia de una irregularidad.
El consejero evitó pronunciarse sobre el posible origen de las piezas e invitó a no especular sobre. Sin embargo, aseguró que el IEE coadyuvará en caso de ser requerido por la Fiscalía, como la autoridad responsable del diseño, elaboración, impresión y resguardo de la papelería: “Tendremos que rendir un informe de todo el trayecto de la documentación, desde su producción, traslado, recolección, distribución con los presidentes de mesas directivas de casilla y posterior devolución a la autoridad”.
Landeros Ortiz aseguró que el día de la contienda no se presentaron denuncias relativas a boletas faltantes en las casillas: “Cuando se entrega el material electoral al funcionario de casilla, revisas y haces una firma de acuse de cuántas boletas, mamparas, urnas y actas está recibiendo el ciudadano; posteriormente cuando se instala la casilla se levanta un acta en presencia de representantes de partidos políticos en la que se vuelve a contabilizar las boletas electorales que se van a utilizar y una vez terminada la jornada, cuando se clausura la casilla, terminando el escrutinio se levanta un acta final en la que se determina cuántas boletas fueron utilizadas y cuántas sobraron y en presencia de los partidos políticos se inutilizan y se firman por los representantes. En caso de que exista una inconsistencia numérica, sería una causal de manejar una incidencia por cualquier representante de partido político”.
Según el artículo 7 de la Ley General en Materia de Delitos Electorales, se castiga con entre 50 y cien días multa y prisión de seis meses a tres años, a quien apodere, destruya, altere, posea, use, adquiera, venda o suministre de manera ilegal, en cualquier tiempo, materiales o documentos públicos electorales.