- Se le pidió a Obras Públicas que detuvieran el procedimiento
- No es la forma, reconozco que hubo un error: Martín del Campo
Reconoció el alcalde capitalino, Antonio Martín del Campo, que la intervención en una parte de la balaustrada del Jardín de San Marcos comenzó a hacerse de forma incorrecta, esto durante los trabajos de restauración que comenzaron el 15 de julio; sin embargo, aseguró que en cuanto tuvo conocimiento de esta situación se le ordenó a la Secretaría de Obras Públicas detener el procedimiento y modificarlo.
Fue este martes por la tarde cuando en redes sociales varios ciudadanos, así como la diputada priista María de los Ángeles Aguilera, compartieron fotografías de los trabajos en el Jardín cuestionando la manera en que se realizaba la restauración, muchos de ellos de hecho desconocían que se reparaba la balaustrada.
Es por eso que Martín del Campo explicó ayer ante los medios de comunicación lo que sucedió realmente: “Sí vi unas fotos en las que habían dañado una parte de un rodapié y parte de la cantera de la balaustrada, la forma y el procedimiento como se hizo no fue la adecuada, inmediatamente yo le hablé al secretario de Obras Públicas para que checara bien eso, que parara eso, porque así no es como se hacen los trabajos ni tampoco así es como se hacen las restauraciones de un monumento histórico”.
El alcalde subrayó que después de esto se le llamó la atención al titular de Obras Públicas, y refirió el procedimiento que se debió seguir: “Ahí lo que se tuvo que haber hecho es lo siguiente: haber cortado con disco, haber retirado la pieza, -que era una pieza, por así decirlo, hechiza porque allí anteriormente ya había sufrido un accidente- y posteriormente con la pieza nueva, lo que es la pieza de cantera volverla a instalar y volver a resanar. Eso es lo que se tuvo que haber hecho, no tuvo que haberse hecho a cincelazos ni a martillazos, ¿por qué? porque eso puede dañar a otra pieza que está en buenas condiciones (…), reconozco que hubo un error”.
La rehabilitación de una parte del Jardín de San Marcos costará un millón de pesos, recurso que proviene del Directo Municipal, se espera que los trabajos concluyan en 90 días, durante los cuales el presidente municipal hará una inspección a raíz del incidente con la balaustrada, “yo voy hacer una supervisión, también espero que no haya existido más daños, yo creo que no en base al informe que me ha entregado el secretario de Obras Públicas y por supuesto también que ha estado muy al pendiente Héctor Anaya, secretario de Servicios Públicos”.
Lamentó que este incidente se politizara “en ningún momento esta administración ha querido dañar y mucho menos un servidor un monumento histórico y tan emblemático como lo es el Jardín de San Marcos y como lo quisieron ver algunos otros actores políticos que muy tristemente hicieron unos muy malos comentarios, sin conocimiento tristemente, porque podemos tener un debate y en ese tema creo que no me van ganar”.
Otra de las molestias de los ciudadanos fue que la obra no tiene ningún tipo de señalamiento, el presidente municipal confirmó que no se ha colocado la información completa: “De hecho la Ley nos dice que todas la obras deben tener una publicidad, decir qué es lo que se está haciendo y qué Dependencia; en esta obra no tiene ni la Dependencia ni número de licencia por parte del INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia), es algo que se tiene que poner por parte de la Secretaría de Obras Públicas”.
A pesar del error que se cometió, el contratista encargado no será sancionado, “yo creo que por el momento no, en el momento en que va a quedar restaurado tenemos nosotros lo que es la supervisión por parte del INAH y también por parte de los arquitectos del INAH, del arquitecto Iván, del arquitecto Arturo quienes son de los encargados del INAH y por supuesto que ellos van a estar muy al pendiente y siempre estaremos bajo la supervisión del INAH de que todas las formas y lineamientos que ellos nos indiquen es lo que se estará haciendo”.
El secretario de Servicios Públicos agregó que el INAH concedió la licencia para los trabajos de restauración, la cual tiene varias condicionantes para garantizar que no haya ningún problema: “Nos impide utilizar varilla como unión entre los elementos, porque esto no es recomendable bajo sus criterios técnicos; nos piden utilizar otros elementos como es latón o un acero inoxidable… vienen una serie de condicionantes sobre todo el tipo de materiales con los que se tiene que realizar el trabajo de limpieza de la cantera, no en todos los casos se va a reemplazar o se va a restaurar, hay algunas partes en las que se va a hacer limpieza y se tiene que hacer también atendiendo a ciertos criterios”.
El análisis previo de las zonas a restaurar se hizo entre personal de INAH y de Obras Públicas, los primeros indicaron cuáles piezas se tenían que reemplazar y cuáles estaban dañadas, “cuáles eran las piezas a lo mejor en donde nada más se le tenía que poner algún tipo injerto y el material también que se tenía que estar poniendo, porque ustedes recordarán un accidente que ocurrió en el 2014, si mal no recuerdo, donde dañó la balaustrada y ahí no quedó bien, no fue el material adecuado; esa parte la estamos reemplazando porque en ese momento lo que hicimos fue rápido instalar, poner algo muy parecido para que no quedara el boquete, hoy que estamos metiéndonos ya a fondo y poder restaurar, hoy sí lo podemos hacer de una forma bien y por supuesto con el visto bueno del INAH”.