Se sabe, se vive y padece, Aguascalientes es una plaza difícil para los espectáculos mientras, claro está, no sea Feria, pese a eso la máxima casa de estudios y la Universidad de las Artes apuestan a carreras dedicadas al espectáculo como lo son danza y las artes escénicas.
La danza es una manifestación artística muy bien aceptada en nuestro estado. Cuando tenemos la oportunidad de ser visitados por grupos de danzas importantes, nacionales e internacionales, es difícil el conseguir entradas al espectáculo, y qué decir de las inigualables tardes de baile de salón que ofrecen los adultos mayores en San Marcos, cada una de las parejas participantes nos transmiten la ternura y la destreza de su pasión por el danzón y el tango. Sus participaciones nos permiten mantener vigente los clásicos y elegantes bailes de los salones que en la actualidad van desapareciendo.
Mas siempre que nos visitan grupos de danza clásica en la ciudad presentan, la mayor parte de las veces, lo mismo. El cascanueces, El lago de los cisnes, los conocemos de memoria y, aunque es seguro que el 80% de la población no lo ha visto, se sabe ya que es una fórmula segura que vende y llena teatros. Si vivimos en una plaza difícil para atraer a los espectáculos o crear espectadores entonces ¿qué les espera a los egresados de las carreras de danza clásica y contemporánea?
Los egresados de teatro tampoco la tienen fácil, sin apoyo para montaje ni para espacios ni un público amante del mismo, el futuro representa un arduo desafío; mas de ello hablaremos en otra ocasión.
La danza clásica, como su nombre lo dice, es ya una tradición. Aburrida para muchos, fascinante para otros, se mantiene vigente y siempre adquiere nuevos seguidores; sin embargo, son pocas las ocasiones en las que los alumnos de dicha carrera exhiben sus proyectos, y su área laboral en Aguascalientes no es tan fructífera como en otras ciudades del país donde apuestan por todo tipo de manifestación artística y la remuneración es justa y no tan raquítica como en nuestro estado.
La danza contemporánea ha presentado algunos proyectos finales en el teatro Morelos con un lleno total y buenas críticas, sin embargo, esta ciudad aún no está preparada para ver danzas contemporáneas con semidesnudos como lo hacen las compañías en la Ciudad de México.
Y la pregunta vuelve, estudien docencia de la danza o no ¿Cuál es su campo laboral local? ¿La apertura de una escuela, la creación de una compañía, salir del estado? Es ilógico que se abran carreras con pocas probabilidades para trabajar y que el propio gobierno no oferte áreas, puestos, espacios para que puedan ejercer, aquí es cuando la pregunta cambia ¿Cuántos bailarines mexicanos conocemos de talla internacional? Ya que el prestigio también exporta y si hay calidad en los estudiantes entonces podemos no preocuparnos por si encuentran o no trabajo en su localidad, pues sabemos que podrán colocarse sin problema alguno en una compañía dancística importante en el país o el extranjero.
Aun cuando se ame sobre todas las artes la danza es frustrante el no poder vivir con un sueldo digno por eso, con sueldos menores a 70 pesos la hora ¿se recompensa los años de estudio y la inversión? Quizá emocionalmente sí, mas si lo vemos como un negocio no es muy estable y es variable.
En nuestra ciudad existen muchas escuelas medianas y pequeñas de danza, su alumnado es preferentemente de menores y no de adultos y pocas presentan proyectos integrales y de verdadera calidad. La mayor parte de estas academias o escuelas no cuentan con especialidad en enseñanza de su disciplina, y tampoco con egresados de danza clásica o contemporánea de la Universidad de las Artes, lo que hace que la calidad sea dudosa y como la mayor parte de los inscritos son menores no pueden tener queja alguna pues sólo eso conocen y no cuentan con otro referente.
Encontramos escuelas especializadas en diferentes disciplinas, las más solicitadas son flamenco, danza clásica, hip-hop, danza árabe, contemporáneo, pole dance (muy de moda) y las danzas polinesias.
Las danzas polinesias, las del pacífico sur, han sobresalido a nivel internacional y un grupo de aquicalitenses participaron ello. En el marco de la Feria Nacional de San Marcos 2015 y 2016 el ballet polinesio Bali Hai se presentó en el teatro Morelos.
Bali Hai representó a México en el festival Tahiti Fête 2014 en Hilo Hawaii y ganó ocho de las nueve categorías que se otorgan. Estos amantes de las danzas polinesias, de todo México, entregaron su vida y vaciaron sus bolsillos para poder participar en el extranjero, su disciplina y entrega los llevó a ser galardonados y a portar durante un año la estafeta de uno de los mejores representantes de esta disciplina en el mundo. Así pues, en dos ocasiones hemos tenido la oportunidad de escuchar y ver a la mejor orquesta y los mejores bailarines polinesios gracias a las actividades culturales que promueven las instituciones dedicadas a la cultura en nuestro estado: el ICA, el Imac y el Patronato de la FNSM.
Este ballet polinesio es la prueba de que los mexicanos podemos competir en cualquier disciplina y salir airosos, con la frente en alto no sólo por competir sino por ser laureados y alcanzar el sueño de colocarse entre los grandes, poner en alto el país y tener la satisfacción de ser los mejores.
Toda compañía de danza tiene la oportunidad de arriesgarse a competir en encuentros y concursos nacionales e internacionales para volver al terruño y saber que el boleto que el espectador paga es garantía de calidad e innovación pues, cada vez que montan un nuevo proyecto necesitan reinventarse a sí mismos y sobrepasar sus propias expectativas de nuevo.
El reto de Gobierno del Estado, al comprometerse a tener egresados de danza a través de la Universidad de las Artes, es colocar a sus estudiantes y a su escuela en los escenarios de primer nivel en el mundo, para que nuestra ciudad sea ejemplo de técnica y calidad.
Si otras disciplinas, en el ámbito privado y con sus propios recursos, pueden sobresalir como el ballet polinesio Bali Hai ¿qué no podría hacer la escuela de danza de Aguascalientes con apoyo gubernamental? Mas sin apoyo, sólo podemos parafrasear dancísticamente a Don Quijote de la Mancha: “Por la libertad así como por la danza se puede y se debe arriesga la vida”.
Laus Deo