Colegio de Estudios Estratégicos y Geopolíticos de Aguascalientes, A.C.
Londres, Inglaterra. 12 de mayo de 2014. El primer ministro del Reino Unido, David Cameron, aparece en el programa Good Morning Britain de la cadena ITV. El político británico se refiere al escándalo suscitado por la revelación de que el vocalista del grupo pop Take That, Gary Barlow, ha invertido 66 millones de libras esterlinas en programas de evasión fiscal.
Cameron dice: “la evasión fiscal agresiva es incorrecta”, pero Barlow puede conservar su Orden del Imperio Británico, pues “ha hecho mucho por el país”. Barlow apoyó la campaña de Cameron a la jefatura del gobierno británico en el año 2010.
La escena arriba descrita sirve como introducción al presente artículo, el cual pretende explicar qué son y cómo trabajan los paraísos fiscales, qué son los Panama Papers y quiénes están inmiscuidos, hasta el momento, en esta trama financiera.
Un paraíso fiscal es una “nación que tiene una tasa baja de impuestos corporativos y de utilidades retenidas sobre el ingreso pasivo”1. Es decir, un paraíso fiscal es un país donde los impuestos a personas físicas y morales son muy bajos o inexistentes. De esta manera, esos Estados atraen a individuos y compañías que buscan pagar menos impuestos de lo que harían en su patria.
Con el fin de atraer recursos financieros a su territorio, algunos países o territorios construyen una legislación fiscal que, explícitamente, tiene la intención de convertirse en un “paraíso” para aquellos que buscan evadir impuestos en sus países de origen.
¿Cuáles son las razones legítimas para establecer un paraíso fiscal? Mantener los secretos comerciales. Es decir, evitar que los competidores se den cuenta de que se invierte en determinados materiales para manufacturar un nuevo producto; Impedir que los prestadores de servicios aumenten sus precios si se dan cuenta que tienen como cliente a una celebridad o a una gran compañía; Mantenerse seguro; Proporcionar servicios de traducción o de vigilancia a diplomáticos, espías o militares en una zona de guerra, y así evitar dejar un rastro.
Las razones menos nobles serían: evitar la detección de recursos provenientes de actividades ilícitas (venta de armas, narcotráfico, etc.); apoyar a grupos subversivos para que desestabilicen a un país opuesto a los intereses de una gran potencia; depositar el dinero proveniente del desvío de recursos públicos, etc.
¿Cómo surgen los paraísos fiscales? Para algunos autores hay que remontarse al siglo XVIII o XIX en Suiza. Aunque otros dicen que la decisión tomada, a finales de los año 1960, por la Reserva Federal de los Estados Unidos de autorizar a los bancos estadounidenses de establecer ramas “concha” (filiales que sólo necesitaban un apartado postal en el país anfitrión) engendró los paraísos fiscales. Las ramas “concha” permitían a los pequeños bancos estadounidenses “participar en el creciente mercado del eurodólar sin tener que efectuar gastos administrativos en un centro monetario europeo de gran envergadura”2.
Los paraísos fiscales más famosos son: Bahamas, Bahréin, Bermudas, Islas Vírgenes, Islas Caimán, la islas británicas del Canal (Guernesey y Jersey), Hong Kong y Panamá.
Es precisamente en este país centroamericano donde ocurrió los Panama Papers. Es decir, la mayor fuga de información en la historia mundial, superando a Wikileaks y las filtraciones de Edward Snowden. Consiste en 11.5 millones de archivos obtenidos de la base de datos de la firma Mossack Fonseca, cuyos registros fueron “obtenidos de una fuente anónima por el rotativo germano Süddeutsche Zeitung”3, el cual los compartió con el Consorcio Internacional de Periodistas Investigadores, quien, a su vez, cooperó con una vasta red de socios internacionales, incluyendo al periódico británico The Guardian y la BBC de Londres.
¿Quiénes han salido balconeados? El precitado David Cameron, cuyo finado progenitor estableció una cuenta bancaria en un paraíso fiscal para evadir al fisco británico; el jefe de Estado de Ucrania, Petro Poroshenko; el presidente de la Fifa, Gianni Infantino, presuntamente relacionado con empresas que cargaban sobreprecios y practicaban el soborno; Serguéi Roldugin, amigo íntimo del presidente de Rusia, Vladimir Putin; Leyla y Arzu Aliyeva, hijas del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev; el mandatario de Argentina, Mauricio Macri, y muchos personajes del mundo de la política, los negocios y los deportes.
Hasta el momento, la única persona del mundo de la política que ha perdido su empleo por el escándalo es Sigmundur David Gunnlaugsson, quien hasta ayer cobraba como primer ministro de Islandia.
¿Hay mexicanos nombrados en los Panama Papers? Sí, y le recomiendo al paciente lector que los busque a través de Google.
¿Quién obtuvo y filtró la información del despacho Mossack Fonseca? ¿Quién se beneficia con las filtraciones? ¿Por qué ocurren en este momento? Estas y otras interrogantes, el escribano espera, se resolverán en los días venideros.
Aide-Mémoire.- El xenófobo y racista Donald Trump ya reveló al Washington Post cómo piensa obligar a nuestro país a sufragar el muro del odio que pretende erigir entre México y los Estados Unidos.
1.- Eun, Cheol S., y Resnick, Bruce. Administración Financiera Internacional. McGraw-Hill, México, 2007, p. 507
2.-Eun, Cheol S., y Resnick, Bruce. International Financial Management. Irwin-McGraw-Hill, New York, 2001, p. 133
3.- Fifa president Gianni Infantino pulled into corruption scandal by Panama Papers http://goo.gl/xzfx0X