- Aunque Aguascalientes figura entre los estados con mejor cumplimiento de cuotas obrero patronales al IMSS, no hay correspondencia con la atención que se otorga
- Pide CCE agilizar la construcción de infraestructura hospitalaria
A pesar de que el estado se ubica entre los primeros lugares en el pago de cuotas obrero patronales, según el Consejo Coordinador Empresarial de Aguascalientes (CCE) hay un bajo nivel de satisfacción de parte de los derechohabientes de las diferentes instituciones de salud respecto a la atención que reciben.
En conferencia de prensa, Pedro de la Serna López, presidente del organismo, denunció que a pesar a pesar del exponencial crecimiento de la plantilla de trabajadores en la entidad, en los últimos seis años el crecimiento de la infraestructura sanitaria ha sido mínimo. El empresario cuestionó la eficiencia en el manejo de los recursos recaudados a través de los patrones: “hemos visto que no se ha cumplido con fechas en las que estarían terminados los hospitales y ampliaciones hospitalarias y nosotros queremos apoyar en lo que a nosotros respecta para que sea terminado el Hospital General de Zona 3, el Hospital de Pabellón de Arteaga y el Centenario Hospital Miguel Hidalgo”.
El dirigente empresarial subrayó la importancia de anticiparse al incremento de afiliaciones derivadas a la incorporación de estudiantes universitarios al sistema de salud ante la de por sí rebasada capacidad de respuesta: “nosotros –los empresarios– estaremos exigiendo que se tengan las instalaciones que requerimos para que sean atendidas todas las demandas de la población”.
Los trabajadores continuamente se quejan de que deben programar una cirugía con cinco o seis meses de anticipación, agregaron otros patrones. Además no hay suficientes médicos especialistas por lo que los pacientes son canalizados a otras ciudades como Guadalajara, León o la Ciudad de México, lo que se traduce en una baja productividad en el ámbito laboral: “son pérdidas en días y horas hombre”.
Manifestaron a los medios de comunicación que con frecuencia no hay cobertura en los medicamentos del cuadro básico, o bien, los fármacos son poco confiables y los pacientes comienzan a presentar problemas graves, especialmente en los tratamientos de largo plazo: “en ocasiones no hay insulina, no hay bolsas para diálisis, ni siquiera hay dónde hacerlas; no hay vacuna contra la gripa, las campañas de prevención no se dan, ¿qué va a pasar si no se informa debidamente lo de las enfermedades que están combatiendo? se atraviesa el año electoral y no se pone atención en la salud básica”.
Otra de las inconformidades más comunes de los derechohabientes, de acuerdo a los miembros del Consejo Coordinador Empresarial, es la rotación de médicos, pues ellos consideran que estas medidas interrumpen el seguimiento de su historial clínico.