- La solicitud será puesta en manos de oficinas centrales
- Laboratorio de Profeco tendría que tomar muestras y analizar que el contenido concuerde con el etiquetado de los productos
Los lácteos son sujetos de Normas Oficiales Mexicanas que deben cumplir en el ámbito federal, aseguró la delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en Aguascalientes, María Teresa Ávila Guel, luego de que un grupo de lecheros protestara a las puertas de la delegación para exigir la expulsión de ciertas marcas que se comercializan como derivados de la leche pero que –aseguran– son fórmulas con escaso valor alimenticio. El argumento de los manifestantes es la publicidad engañosa que, junto con los bajos precios que se manejan, han desplazado el verdadero producto del mercado.
Aunque la funcionaria aseguró que las marcas aludidas en la manifestación también se encuentra avalada por la Secretaría de Salud, aceptó asesorar a los ganaderos para que presenten una denuncia sustentada en los engaños publicitarios en los que presuntamente incurren, de conformidad con el artículo 97 de la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) para que se inicie un procedimiento administrativo: “la petición fue el engaño al público respecto a la venta de productos o de bebidas que se dicen leche pero que no son leche”.
Sin embargo, por la naturaleza de la denuncia, el asunto no puede ser desahogado en la delegación, sino que deberá ser remitido a oficinas centrales para que a través del Laboratorio de Protección al Consumidor se tomen muestras y se verifique que su contenido coincida con la información de las etiquetas: “Les dije que mi equipo y yo estamos a sus órdenes (…) les dije que si querían empezar con este procedimiento podían empezar uno por la publicidad engañosa para que acreditaran en medios masivos de comunicación y otro con respecto a la etiqueta y contenido del producto. Si (los lecheros) cumplen con los requisitos que marca la ley debe darse procedencia a la denuncia en competencia de la Procuraduría”.
A pesar de que no es la primera vez en que los productores se deshacen públicamente del lácteo que no pueden vender, hasta ahora no habían acudido a la Procuraduría Federal del Consumidor a exponer sus inquietudes: “la delegación será el salvoconducto para que la solicitud que de ellos emane, vía escrita, se le pueda dar seguimiento en oficinas centrales para darles una adecuada atención”.
Una vez formalizada la denuncia, la autoridad deberá tardar hasta diez días hábiles en definir si se admite o no y notificar al denunciante en los siguientes diez días hábiles de acuerdo con los plazos establecidos por la ley.
La delegada de Profeco dijo que en la reunión sostenida este lunes, se les dio a conocer que las Normas Oficiales tienen una vigencia de revisión de cinco años. La que compete se encuentra dentro del periodo en que pueden acercarse para requerir una revisión observación y hacer los comentarios que se tengan que hacer.
