¿Cómo le fue en Semana Santa 2016? Quizá sea usted de los que asisten con gran fervor a los oficios de su capilla católica y considera que de jueves a domingo son “días de guardar”; o quizá sea de los que hacen “carro sardina” y en su automóvil compacto carga familia, suegra, amiguita de la adolescente hija y hasta al “negro”, el perro raza labrador consentido de todos (¿Cómo cabe el labrador en el auto compacto? ¡Ni la mínima idea!); con destino al lugar de descanso más cercano a Agüitas.
Quizá es de los que reciben en casa a familiares y amigos que le consideran la perfecta anfitriona o el perfecto anfitrión; al arrasar con sus reservas de comida, bebidas, toallas limpias, papel sanitario y paciencia incluida. O quizá simple y llanamente usted y su familia vivieron a base de pizza y palomitas de maíz instantáneas; películas antiguas transmitidas en televisión o modernas series de la aplicación Netflix. No se preocuparon por su aspecto personal en cuatro días y de plano no atendieron llamados a la puerta de casa; colocando en su cuenta de What’s la leyenda “no puedo hablar, sólo mensajes” y dejando que se acumularan en su cuenta de Face un gran cúmulo de noticias.
Lo importante, respetando su estilo de pasar semana santa, fue aprovechar al máximo esos cuatro días de feriado nacional para lo que fuese prioritario para usted y su querida familia. ¡Ahora! Que en el medio político hidrocálido, estos días de dispersión en las actividades cotidianas fueron bien aprovechados por unos cuantos “malandros”, Ernesto Zedillo, expresidente de la República, dixit; que sembraron en la red electrónica Facebook, unos cuantos “actos anticipados de campaña” ¡Sí! Pero de campaña ajena. Láncese por un refrescante calimocho (bebida a base de refresco de cola, vino tinto afrutado, jugo de limón y hielo) que se lo cuento.
Actos anticipados y calabazas. ¡Mire usted! Los actos anticipados de campaña, tienen similitud con las deliciosas calabazas verdes o calabacines. Si usted desea cocer unas cuantas calabazas verdes en agua o algún caldo, debe incorporarlas al líquido hirviendo ¡en el momento justo! El cual es tres a cinco minutos antes de apagar el fuego. Si las pone antes, obtendrá un espantoso puré de calabaza, más bien amarillento; la pulpa y semillas de sus calabacines se ablandarán y tornarán en una consistencia tipo gelatina, muy poco atractiva. Y si los pone después del momento ideal, sus calabacines renovarán su verde color y se verán muy atractivos, sólo que no se habrán cocido, sólo “blanqueado” y estarán crudos. Verdes y brillantes sí, pero crudos: duros y lechosos.
Ladrón de calabazas. Algún ladrón o ladronzuela le robó a Lorena Martínez unos videos y unas fotografías con los que, en su momento, una vez iniciada legalmente su campaña, daría a conocer su propuesta de trabajo y salarios. El malandro o la “malandra” subieron a la red electrónica Facebook esos videos y esas fotografías. ¿Por qué o para qué? Se preguntará usted. ¡Pues para simular actos anticipados de campaña de Lorena! Respondo yo. Pretenden con ello obtener una sanción del Instituto Estatal Electoral a doña Lorena y causarle daño grave a su campaña. El castigo puede ir desde una multa, hasta el retiro de su candidatura mediante el rebase de tope de campaña.
Malandro calabacero. Los malandros o las “malandras” que simularon actos anticipados de campaña en contra de Lore Martínez subieron a Facebook las fotografías y videos robados a la propia candidata registrada por PRI, Verde, Nueva Alianza y PT; antes del tiempo en que es legal hacerlo. De ahí que establezcamos similitud con las calabazas verdes bien cocidas. Si los videos se suben en tiempo de campaña, que es a partir del 3 de abril próximo: todo bien. Pero si aparecen antes, se comete una infracción a la ley electoral.
En una expresión simple: le pusieron a Lorena Martínez una trampa electoral, con sus propios videos y sus fotos, producidos en el extranjero. ¡Hágame usted el favor!
Alguien calabaceado. Al que o a la que sin duda calabacearon, maicearon, compraron, sobornaron o como se diga, es al colaborador o colaboradora de Lorena, a través de quien fueron sustraídos videos y fotos. Alguien debe responder por la fuga o bien por el robo de información (lo segundo en el mejor de los casos), ya que salta a la vista que algún sujeto, siendo responsable de la tenencia y secrecía de tales producciones, no cumplió con su deber de cuidado o, peor aún, tranzó en beneficio propio. En ambos supuestos existe una responsabilidad civil y quizá penal que exigir y que perseguir.
Del origen en la difusión de fotografías y videos ¡Mejor ni hablamos! El cobarde simulador de actos anticipados subió el material de “semana santa” a través de páginas apócrifas. No hay delincuente que fabrique pruebas contra sí mismo y, si las tiene, las destruye o esconde. El malandro calabacero se guardó tras el anonimato vergonzoso, pero servil a las acciones delincuenciales de los adversarios de la señora.
¿Esta es la campaña de altura que merecemos los hidrocálidos? ¿Qué gobierno podemos esperar de quien llegara a ganar, derrotando a sus adversarios mediante el robo y la simulación? Los delincuentes, no merecen un solo voto. Los delincuentes merecen sólo una cárcel. ¡Basta ya!
Usted y yo, estimada lectora, querido lector. Nos vemos en la próxima.
Excelente colofón sobre tu interesante aportación, estimada Coco, a final de cuentas ¿cómo poder legitimar un gobierno que se basa en la calumnia, en la trampa, en la mentira para poder acceder al poder?, dicen que “los pueblos tienen el gobierno que merecen” y ciertamente como tú lo afirmas, los aguascalentenses no nos merecemos este tipo de actitudes, creo que la experiencia lo ha demostrado, no queremos un Aguascalientes en retroceso, un Aguascalientes que pierda lo que hasta ahora con muchos sacrificios se ha ganado, somos un pueblo maduro y cosmopolita, con la llegada de tantos paisanos y extranjeros que han venido con las nuevas fuentes de empleo, pero nuestras raices como pueblo sobreviven y es nuestra responsabilidad que sobrevivan, no al Aguascalientes inseguro, no al desempleo, no al narcotráfico, solo aquel que no recuerda su historia está condenado a repetirla.
Saludos
Coincido Leo Cabrera. No debemos volver a la época en que en Agüitas, reinó la delicuencia. Gracias por comentar.