- Concentrar tanto poder en un solo organismo o nivel de gobierno da pauta para el abuso y corrupción
- El sistema rompe con la responsabilidad del municipio de garantizar la seguridad de su demarcación
Se pronuncia el Partido del Trabajo en contra de la creación de la Policía Única, modelo de seguridad propuesto por el presidente Enrique Peña Nieto en 2014 entre sus diez acciones para mejorar la seguridad, la justicia y el Estado de Derecho en el país. Ello al considerar que concentrar tanto poder en un solo organismo será un grave riesgo para la seguridad de los estados.
El diputado representante del PT en la LXII Legislatura, Jesús Rangel de Lira, puso énfasis en que la seguridad pública es la responsabilidad primordial de los municipios, no del estado ni la federación, y antes de hacer un cambio tan radical se debería de revisar las inconsistencias e inequidades que se tienen en las policías municipales como la disponibilidad de elementos, el salario y las prestaciones para quienes integran los cuerpos de seguridad.
“Definitivamente el PT irá en contra de la consagración de la Policía Única porque dará sólo pie al abuso de poder y corrupción”, ya que se ha demostrado que concentrar demasiado poder en un solo órgano o nivel de gobierno es riesgoso y sin resultados positivos en la aplicación de los sistemas de seguridad: “no por nada el sistema es federalista en el país, donde se descentraliza las responsabilidades y hay un equilibrio de poder”.
Aunque el gobernador de Aguascalientes insiste en que podría ser el primer estado del país en tener una Policía Única, el legislador aclaró que para ello necesitarían la aprobación de la mayoría en el Congreso, así como de los once presidentes municipales, situación que no está palpable pues la mayoría de los diputados (incluso del PRI) están dudosos de este nuevo sistema.
En el caso de los alcaldes, reconoció que algunos están a favor pero debido a los recursos que por el acuerdo de la eficacia de la misma, pues el desconocimiento de la política y de la responsabilidad que se les asignaron democráticamente los confunden con cuidar siempre los recursos económicos: “a ellos se le hace más sencillo quitarse la responsabilidad de la seguridad de su municipio y que el estado lo absorba todo”, sin embargo esto rompe con su responsabilidad primordial que es el garantizar la seguridad de los habitantes de su demarcación; para Rangel de Lira, bajo esa perspectiva es difícil que cualquier alcalde que no va a tener el manejo de la policía pueda garantizar la seguridad del Ayuntamiento.
Se recordó que los municipios son autónomos y por lo tanto no deberían de violentar su facultad y responsabilidad en materia de seguridad pública, si bien se reconoce que asuntos como el crimen organizado tiene un nivel mayor de facultades, las policías municipales no pueden ser eliminadas para la atención de los delitos del fuero común, alteración del orden público, las pandillas, entre otros; de ahí su aprobación para el Mando Único pero no de una policía única: “es distinto, el Mando Único ha distribuido responsabilidades aunque también necesita sus arreglos y adecuaciones”.
A finales del mes de diciembre del 2015 el gobernador de Aguascalientes, Carlos Lozano de la Torre, aseguró ya contar con un acuerdo firmado por los once presidentes municipales en aprobación del nuevo esquema policiaco, sin embargo el diputado petista insistió en que el acuerdo se trató del Mando Único, en el cual se solicitó incluso una revisión general al sistema, sobre todo en cuanto a salario, prestaciones y elementos prestados por los municipios.
