Soren de Velasco Galván
Colegio Aguascalentense de Estudios Estratégicos Internacionales, A.C.
Torre Trump, Manhattan, Nueva York, Unión Americana. 16 de junio de 2015. Teniendo como fondo un estrado cubierto con la bandera de las barras y las estrellas, el magnate inmobiliario, Donald Trump, fustiga al Estado Islámico, China, y Japón al decir: “Nuestro país está en serios problemas. Ya no tenemos más victorias. Solíamos tener victorias, pero ya no las tenemos”.
Sin embargo, la estrella del reality show El Aprendiz, reserva su ponzoña para México cuando dice: “¿Cuándo vencemos a México en la frontera? Se burlan de nosotros, de nuestra estupidez. Y ahora ellos nos están venciendo económicamente. No son nuestros amigos, créanme. Pero nos están matando económicamente”.
La escena arriba descrita sirve como prólogo para el presente artículo, el cual pretende analizar y explicar el mensaje de Donald Trump en la fase previa a las elecciones primarias del partido Republicano, las cuales se tendrán lugar en Iowa y New Hampshire.
El ciclo de las campañas políticas en los Estados Unidos se divide en cuatro etapas, las cuales se catalogan de la siguiente manera: preprimaria, primaria, convención y la elección general.
La primera etapa o preprimaria es conocida popularmente como winnowing period -“período de selección”. Sin embargo, otros autores la definen como “salir a la superficie”, pues es una “serie de transacciones retóricas predecibles y específicamente cronometradas las cuales tienen funciones instrumentales y de consumo durante la fase pre-primaria de la campaña”1.
El mensaje político en esta fase tiene dos aspectos simbólicos pero importantes: “provee una indicación de la capacidad del candidato para buscar un puesto de elección popular e inicia el ritual que se espera en una campaña política”2. Igualmente, hay que considerar cinco funciones instrumentales.
La primera función instrumental es un intento por determinar si el candidato tiene apoyo y con quién. Trump, con sus mensajes a través de las redes sociales -facebook y twitter- y sus actos masivos de campaña, ha logrado que su potencial programa político y posiciones apelen a la base republicana: los blancos evangélicos, la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés), los pequeños empresarios y las personas de raza blanca pertenecientes a la clase trabajadora.
A continuación se encuentra la revelación sobre el estilo personal y administrativo del candidato. En este aspecto, Trump ha sido descrito como fiery -“fogoso, enardecido” en inglés. Asimismo, cuando el precandidato republicano fustiga la incompetencia de algún funcionario público en los Estados Unidos, emplea la frase que utilizó en “El Aprendiz”: You are fired! -“¡Estás despedido!”-. Finalmente, afirma que la frontera sur de la Unión Americana debe ser gestionada como una empresa, y que un empresario exitoso como él sabrá hacerlo: “Necesitamos fronteras fuertes. Necesitamos un muro. El rey de la construcción de edificios, el rey de la erección de muros -nadie de ellos puede construirlos como Donald Trump”.
La tercera función instrumental en la etapa preprimaria es fijar el tema dominante o los asuntos de la campaña. En este sentido, Trump, con su recado en contra de México y el Estado Islámico, ha logrado determinar la agenda. Tal y como lo demuestra su primer video promocional, diseñado para las elecciones primarias, en donde la voz del narrador dice que Trump “cortará la cabeza de Daesh y tomará su petróleo”3. Asimismo, se ven supuestas imágenes de la frontera con México en las cuales los inmigrantes ilegales penetran en suelo norteamericano -esta parte fue tomada de un incidente ocurrido, en 2014, en Melilla, un enclave español en Marruecos.
Aquí cabría mencionar que el precandidato republicano, Ted Cruz, también acaba de lanzar un spot en contra de la inmigración ilegal en donde afirma que “los políticos actuarían muy diferente si un montón de abogados y banqueros estuvieran cruzando el río Grande”.
La visibilidad, otra función instrumental, es una de las fortalezas de Trump, quien era conocido por sus éxitos en los negocios inmobiliarios y por ser el conductor de “El Aprendiz”.
La última función instrumental es la relación con los medios de comunicación. La prensa electrónica afín al Partido Demócrata -ABC, CBS, CNN, NBC- aborrece a Trump. Sin embargo, el magnate inmobiliario “da la nota” y, mañana, tarde y noche, aparece en los principales noticiarios de la Unión Americana. Por su parte, la cadena noticiosa conservadora, Fox News, pone a Trump por las nubes, a pesar de que “el pelucón” (Nicolás Maduro dixit) criticó a su conductora estrella, Megyn Kelly.
¿Cuál ha sido el resultado de la estrategia de comunicación política de mr. Trump? En una encuesta publicada el 28 de diciembre de 2015, Rasmussen dice que el 37 por ciento de los votantes sufragaría por Hillary Clinton, mientras que el 36 por ciento lo haría por Trump.
Al momento de redactar estas líneas, una encuesta de NBC sostiene que el 35 por ciento de los republicanos votaría en las elecciones primarias por Trump, mientras que únicamente el 18 por ciento lo haría por Ted Cruz, quien lidera en Iowa.
Finalmente, cito a Stan Greenberg, experto estadounidense en comunicación política, quien dice: “Los políticos siempre han usado diversos instrumentos para averiguar dónde estaba su electorado. El marketing político simplemente agranda ese conjunto y le ofrece un marco estructurado”.
Aide-Mémoire.- Arabia Saudita e Irán al borde de la guerra; España inmersa en la incertidumbre política; Venezuela dividida; y milicias estadounidenses dispuestas a combatir a su Gobierno Federal; migrantes ahogados en el mar Egeo ¡Vaya inicio de año!
1.- Judith S. Trent et al. Political Campaign Communication. Rowman & Littlefield, New York, 2011, p. 21
2.- Ibidem, p. 29
3.- http://goo.gl/Kz2BFq