- La delegación ya prepara planes de acción por contingencias por falta de lluvia
- Niveles de presas garantizan abasto para el presente ciclo de riego
Los pronósticos hablan de un año de sequía para Aguascalientes. Según informes meteorológicos formulados la Comisión Nacional del Agua (Conagua), una escasez de lluvia podría presentarse en 2016, por lo que es necesario establecer estrategias para aminorar los efectos del clima.
El delegado de esta dependencia, Salvador Gaytán Rangel, informó que en coordinación con las tres órdenes de gobierno se diseñarán planes de acción para afrontar los posibles escenarios que puedan presentarse en este año: “la sequía podría ser fuerte o podría pasar desapercibida, porque tenemos un buen volumen de agua almacenada, pero si este fenómeno se alarga podríamos llegar a un estado crítico, por eso hay que cuidar toda la lluvia que ha caído en años anteriores”.
En entrevista, reconoció que las previsiones climatológicas siempre presentan un grado de incertidumbre. A consecuencia del fenómeno El Niño pudieran registrarse lluvias de moderadas a intensas en próximos meses, pese a lo que llegue a pronosticarse a principios del año.
Aunque las presas de la entidad registran altos niveles de almacenamiento, el funcionario llamó a los usuarios a racionalizar el consumo para que el vital líquido existente permita abastecer los próximos ciclos de riego. Por lo pronto los bordos y obras de baja capacidad sólo tienen agua para satisfacer las necesidades agropecuarias del presente año.
Gaytán Rangel agregó que el agua para consumo humano siempre será prioritario por sobre la agricultura y la ganadería: “debemos cuidar el agua que tenemos, nosotros esperamos que se repitan las precipitaciones de 2015 pero nos informan que posiblemente no sea así y sabemos que la sequía es más grave que las más fuertes lluvias”.
Por otra parte, el delegado de Conagua adelantó que en caso de haber escasez de lluvia, se impulsará un programa de limpieza y desazolve de embalses, toda vez que los residuos orgánicos e inorgánicos que tienden a acumularse en los lechos reducen la capacidad de contención de agua de lluvia. La operación puede realizarse en cualquier temporada, sin embargo es menos costoso cuando las presas se encuentran en niveles bajos: “necesitamos desazolvar todos los embalses ya que algunos que sólo reciben el 50 por ciento de su capacidad (…), Aguascalientes ya tuvo años y temporadas de sequía, pero en ese tiempo no se aprovechó”.
Comentó que la materia que se extrae de los lechos es “oro molido” para los agricultores debido a la riqueza orgánica de los lodos y ramas, mismos que pueden utilizarse como fertilizante en las tierras de cultivo.