- La víctima mortal del ataque perpetrado en un restaurante no es empresario del transporte
- En Aguascalientes ningún transportista tiene acercamientos con la delincuencia, asegura Díaz Ruiz
Rafael Martín Mora Mendoza, quien el pasado miércoles fue asesinado de un balazo adentro de un restaurante en el norte de la ciudad capital, no era transportista como algunos medios de comunicación informaron, aclaró Roberto Díaz Ruiz, presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar).
Según el dirigente camaral, el occiso de 46 años de edad resultó ser un homónimo del propietario de transportes La Perla y presidente del consejo de administración del grupo Estrella Blanca: “me comuniqué con la familia Mora Herrera, no fue el hijo a quien mataron, la víctima no era familiar de los empresarios originarios de Encarnación de Díaz Jalisco (…), sin embargo cualquier pérdida humana es algo que lamentamos mucho”.
En conferencia de prensa, Díaz Ruiz aseguró que ninguna empresa de este sector en Aguascalientes ha tenido acercamientos con el crimen organizado ni solicitudes para desplazar drogas, armas ni otras mercancías ilegales.
Reconoció que la industria local del transporte carguero no se encuentra exenta de la inseguridad que se vive en otros estados, pero hasta el momento no se cuenta con reportes que digan lo contrario: “ha habido unidades detectadas con sustancias en las puertas sur y norte, pero la mayor parte han sido camiones de pasajeros, quienes son los que trasladan la droga al norte del país (…), sabemos que en ocasiones amenazan a los choferes con que sabemos donde vive tu familia si no mueves este paquete, pero no ha sido el caso en el estado”.
El empresario comentó que Aguascalientes es la tercera entidad más segura para el transportista, sólo después de Campeche y Yucatán; pero no por eso deja de ser necesario reforzar la seguridad en carreteras para conservar la paz y tranquilidad que aquí predominan.
Estimó que cada empresa del autotransporte destina hasta un 12 por ciento de sus ingresos en medidas de protección al trabajador, a la unidad y a la carga que se traslade, que en ocasiones se valúa en millones de pesos. Además se ha buscado que los empleados denuncien cualquier hecho delictivo que experimenten.
Muchas líneas han contratado sistemas de geolocalización para monitorear rutas, horarios, paradas y pernoctas con el fin de detectar oportunamente cualquier desvío para accionar una alarma que detona un operativo por parte de corporaciones de seguridad. El presidente estatal de Canacar mencionó que es más fácil robarse un vehículo de la ciudad que en una carretera, con un margen de error de hasta 30 metros que permite identificar cualquier desviación.
Díaz Ruiz recomendó tomar providencias para impedir atentados como el de anteriores días: “recomendamos que no haga la misma rutina todos los días pues si ya estás en la mira de esa gente puedes ser blanco de un hecho delictuoso; además tomar diferentes caminos en las rutas que sigas; evitar la ostentación porque hay quien presume hasta lo que no tiene, pero ahora no son tiempos de lucir un potencial económico con el que muchas veces ni siquiera se cuenta para que le cobren un rescate de diez millones de pesos”.