- La CNDH emitió una recomendación general a todos los estados a reformar sus códigos civil y familiar
- Aún no hay consenso entre grupos parlamentarios ni grupos sociales
- Es un tema sustantivo de los derechos humanos, así tenemos que verlo y resolverlo, dice Varona Rodríguez
El pasado 20 de diciembre la Comisión Nacional de Derechos Humano emitió una recomendación general (la número 23 según los registros del organismo) dirigida a los poderes ejecutivos y congresos locales de todo el país en materia del matrimonio igualitario, tema que en Aguascalientes ha sido buscado desde hace dos legislaturas sin avances en el debate ni adecuaciones en el marco legal.
El titular de la Comisión Estatal de Derecho Humanos (CEDH), Jesús Eduardo Martín Jáuregui, recordó que desde hace más de dos meses el Poder Legislativo de Aguascalientes tiene una propuesta en la materia, por lo que exhortó a los diputados a dejar atrás las ideologías personales y acatar las recomendaciones que desde la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), y ahora de la CNDH, se han señalado como urgentes y en acuerdo a la no discriminación.
El documento público presentado en el portal digital de la CNDH explica que se trata de una recomendación general para que cada estado adecue los correspondientes ordenamientos en materia civil o familiar para permitir el acceso al matrimonio a todas las personas y en condiciones tales que se impida cualquier tipo de discriminación.
Martín Jáuregui subrayó que lo único que hace la Comisión Nacional es retomar una decisión de la SCJN en el sentido de que no pueden existir uniones especiales para personas que tengan una preferencia sexual diferente a la heterosexual porque para que se hable de una igualdad y no discriminación las personas con preferencia sexual distinta a la heterosexual deben tener el derecho de contraer matrimonio sin ninguna limitación: “en algunos estados todavía tienen la distinción entre una unión especial para homosexuales y el matrimonio para heterosexuales, esto a vista de la Corte y de la CNDH no es posible pues todo debe ser igual”.
Se agregó que a la fecha el Distrito Federal y Coahuila son los únicos estados que han modificado sus códigos civiles y familiares para permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo, y algunos otros, como Nayarit, han intentado regular el tema como uniones civiles diferenciadas del matrimonio: “son estas figuras conocidas como sociedades de convivencia, enlace conyugal o el otro llamado pacto civil de solidaridad, pero ninguno es aprobado por la autoridad porque se consideran discriminatorias”, ya que éstas generan regímenes distintos de derecho para regular una situación que debería de ser pareja.
Con base en las disposiciones de la Corte y los acuerdos internacionales en materia de derechos humanos que México ha firmado, este organismo nacional decide presentar una recomendación general, lo cual para los diputados es una llamada de atención pero no una obligación, pues primero deben analizar a fondo las consecuencias positivas y negativas que la reforma causaría en la sociedad.
Desde la CEDH se reiteró que esta petición ya la tienen desde hace más de dos meses en el Congreso, mediante un análisis legislativo realizado por la misma comisión y organizaciones civiles como el Colectivo Sergay; en el cual se contemplan básicamente cuatro temas principales: el matrimonio entre personas del mismo sexo, la adopción de hijos por parejas del mismo sexo, la alineación sexogenérica en actas para las personas transexuales y el desaparecer de las actas de defunción la causa de la muerte al considerarse como un elemento para la discriminación de la persona fallecida o familiares.
“Esto está planteado desde hace meses, inexplicablemente no ha subido a comisiones y mucho menos al debate en pleno, pero sí se suben otras cosas”, se insistió en que la imposición de “procrear o la perpetuidad de la especie como fin del matrimonio” es un acto que contradice a la Constitución y varias disposiciones internacionales sobre el derecho de autodeterminación de la persona y al libre desarrollo de la personalidad, razón por la cual los congresos deben dejar de “echarse la pelotita” y acatar la recomendación de ambas instituciones nacionales.
Desde el Congreso de Aguascalientes, el presidente de la Comisión de Gobierno, Jorge Varona Rodríguez, puntualizó que no se trata de una obligación final sino de una recomendación para que se armonicen las leyes locales con las disposiciones nacionales: “vamos a lo mismo de siempre, se requiere consenso y este aún no se logra”, la opinión personal del diputado priista es a favor de que se reforme el Código Civil y se permita sin discriminación que dos personas del mismo sexo contraigan matrimonio civil, sin embargo el trabajo legislativo no se basa en opiniones personales sino en consensos y análisis de todos los grupos parlamentarios y fuerzas políticas, por lo tanto reiteró que se tendrá que trabajar más en el diálogo para tomar la decisión más pertinente, no sólo porque haya una recomendación de entidades “de respeto”, sino porque es un tema que afecta las sensibilidades y convicciones de sectores muy importantes de la sociedad que también deben de escucharse (como la Iglesia católica y organizaciones civiles de conservadores): “Claramente digo que este es un tema sustantivo de los derechos humanos, así tenemos que verlo y resolverlo, debemos atenderlo ya”.
Al ser cuestionado sobre si existen ya las condiciones para comenzar a debatirlo, el legislador respondió: “Interprete mi silencio. La realidad es que no hay suficiente todavía porque es un tema muy controversial, pero el camino siempre será el diálogo”, se comprometió a trabajar por un razonamiento y reflexión adecuado para destrabar el tema, ya que, más allá de las convicciones personales de cada diputado, si es incongruencia con el marco constitucional general, deberán legislarlo.