La edición 2014 del Premio Nacional de Literatura Joven la ganó Jehú Coronado López, con su poemario Sangre, del que el jurado conformado por Jorge Esquinca, Jorge Humberto Chávez y Eduardo Hurtado, destacaron que se trata de “un libro de excelente factura, trabajado con un lenguaje poderoso y una voz marcadamente individual” y reconocieron que el autor nacido en Monterrey, Nuevo León, destaca por una “postura que confronta al mundo con ironía y autocrítica, dando como resultado textos cargados de energía y significación”. Sangre se presentó ayer en la Feria del Libro, en una coedición del Instituto Cultural de Aguascalientes y el Fondo Editorial Tierra Adentro.