Demasiadas veces me ha sucedido, en diversos foros y con diferentes personas, que cuando se enteran en cuál institución trabajo, la llegan a confundir con el ahora Instituto Nacional Electoral, antes IFE, por lo que ello me ha llevado a construir un discurso que trata de brindar una explicación resumida acerca de la forma más fácil de distinguir entre una y otra institución, que resultan ser los ámbitos en los cuales ejercen las funciones que tienen encomendadas cada una de ellas.
Y es que es hasta cierto punto entendible que el común de la gente pueda suponer que el INE es el único encargado de organizar las elecciones, debido entre otros factores a que es el responsable de emitir la credencial para votar con fotografía, instrumento que junto con la Lista Nominal (también bajo el encargo del INE en su confección) son la materialización del derecho al ejercicio del voto ciudadano. Aunado a lo anterior es de suponer que se conozca más a la institución nacional que a la local entre otros factores, por la presencia que tiene el INE en todos los medios de comunicación del país, no así el Instituto Estatal Electoral de Aguascalientes en lo particular, en el que su promoción es, por ende, meramente local.
Supongo, además, que esa es una situación común por las charlas y anécdotas que mis compañeros en el Instituto Estatal Electoral cuentan acerca de ser confundidos con el INE en una multitud de escenarios: desde los capacitadores electorales que eventualmente van proceso tras proceso en búsqueda de los funcionarios de casilla que son recibidos al grito de ¡Ya llegó el del INE!, hasta las veces en que por redes sociales o vía telefónica hemos atendido gustosamente a la ciudadanía en nuestra modesta trinchera, turnando al Nacional las cuestiones de la gente preguntando acerca de la emisión de su credencial, o los requerimientos del proceso electoral intermedio que tuvo su jornada electoral durante este 2015.
A últimas fechas se ha agregado un elemento más a esta confusión, que ha provocado que ahora al discurso mil veces ensayado y otras tantas expresado, se le añada la explicación de si el Instituto Estatal Electoral ya no se denomina así debido a la reciente reforma en donde, para hablar de las instituciones encargadas de organizar los procesos electorales en las entidades federativas, se ha utilizado el genérico Ople.
Ople son las siglas de Organismo Público Local Electoral, figura en la que la legislación nacional ha agrupado precisamente a las instituciones que cada estado posee y que tienen como importante función la de realizar todas las actividades tendientes a que las elecciones de las autoridades locales se lleven a cabo en apego a los principios rectores del sistema electoral. Y por autoridades locales encontramos una diversidad propia de las características de cada entidad de la República, llámense gobernador, jefe de gobierno, diputados, alcaldes, presidentes municipales, munícipes, regidores, síndicos, jefes delegacionales, y cualquier otra autoridad administrativa local de elección popular incluso por métodos de usos y costumbres.
No pertenecen al INE porque todos los Ople gozan de autonomía, y además coexisten con la estructura delegacional del Instituto Nacional, es decir, a la par del Ople de Aguascalientes, también existe la Delegación del INE en Aguascalientes, como en cualquier entidad de la República. No hay duplicidad de funciones porque se encuentran claramente establecidas y delimitadas en la legislación para cada institución, el Instituto Estatal Electoral no puede emitir una credencial local para votar como el INE no puede emitir la constancia de mayoría una vez electo el gobernador.
La razón de ser conocidos genéricamente como Ople, es por la diversidad de denominaciones institucionales que surgen a lo largo y ancho del territorio nacional. Referirse a cada una de las instituciones que, en esencia, realizan las funciones de elecciones locales implicaría hablar de Institutos Estatales Electorales, Institutos Electorales, Institutos Electorales y de Participación Ciudadana, Consejos Electorales, Consejos Estatales Electorales y demás, lo que hace impráctico, optando entonces el legislador por referirse en genérico cuando las disposiciones les atañen a las instituciones locales organizadoras de procesos electorales en cada una de las entidades federativas.
Lo que sí debe quedar en claro para todos, es que ninguno de los Ople pierde su denominación particular por la que es conocida en su ámbito local. Así, en el caso de Aguascalientes, el Instituto Estatal Electoral no dejará de ser el de la “doble e”, aunque en algunas cuestiones tendremos que acostumbrarnos a que se refieran a nuestra institución, y con nuestra me refiero a la institución de todos los aguascalentenses, como el Ople de Aguascalientes.
Con eso seguramente incrementaremos el anecdotario, no sólo de las veces en que nos han confundido con el INE, ahora además, las veces en que por una falsa creencia se pensó que ya no seríamos conocidos como IEE sino como Ople.
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@LanderosIEE