- La renovación de la dirigencia estatal tiene que empezar a trabajarse con cuadros experimentados
- Ni Juárez ni Tavarez cumplen el perfil de dirigente estatal al ser de mi equipo de trabajo, reconoce Lorena Martínez
- Se reúnen aspirantes a la gubernatura para establecer reglas de la competencia
Es necesaria la renovación de los Comités Directivos estatal, municipales y hasta seccionales ahora que el Revolucionario Institucional está en proceso de cambio nacional, ya que la militancia aguascalentense exige ya mejores estrategias para obtener mayores resultados y un proceso de fortalecimiento interno.
Para Lorena Martínez Rodríguez, actual titular de la Procuraduría Federal del Consumidor y líder priista en Aguascalientes, puntualizó que la figura de dirigente en cualquiera de sus ámbitos, tiene que contar con un perfil de árbitro para que los procesos internos sean acordes a lo que la militancia exige y la ciudadanía necesita; “lo que en la actualidad está demandando el estado es una nueva dirigencia estatal como árbitro de la contienda para que no lleve los dados cargados para nadie”.
Se le cuestionó si el priismo de Aguascalientes tenía en la actualidad un líder como el que describe, y después de unos segundos en silencio respondió que el CDE necesitaba ya una renovación total con algunos de los cuadros “altamente capacitados” y con la experiencia (no necesariamente de años, sino de acciones) para aglutinar a todo el priismo local, inclusive para aumentar la matrícula de militancia y que se se refuerce la simpatía de muchos ciudadanos.
“Yo creo que tenemos cuadros valiosos, a mí me gustaría ver en el PRI de Aguascalientes a uno que juegue como árbitro, que no lleve preferencia por nadie, ni por la mía, porque el estado se merece un proceso limpio y un candidato realmente capaz de vivir y ganar la elección”, con lo que el nuevo presidente estatal del PRI tendría que generar espacios de interlocución para sentar a todas las expresiones hasta llegar a un acuerdo de victoria para el 2016.
Martínez reiteró que está convencida de que pronto llegará la renovación del CDE en términos de una convocatoria abierta, y aclaró que tampoco se trata de “echar a la calle a alguien”, con respecto a lo que Francisco Guel Saldívar había señalado, que de no ganar las elecciones pasadas renunciaría al cargo, “esto no es un juego de apuestas, es un partido serio que necesita respetar los estatutos y por ellos ya le toca pronto la modificación”.
Aunque prefirió no decir algunos nombres para evitar problemas secundarios, subrayó la necesidad de que el partido piense bien cómo llevará a cabo el proceso, elegir al nuevo dirigente estatal es un acto de madurez donde resalte la objetividad y no el amiguismo, donde el elegido tenga capacidad para organizar y aglutinar a los priistas y poner la “cancha pareja a todos” en los próximos comicios.
Al señalarle que Enrique Juárez y Roberto Tavarez ya han manifestado su interés por el cargo, Martínez Rodríguez expresó que son dos personas muy leales al partido pero por ser parte de su equipo político no cumplirían con el perfil de objetividad ni arbitrio limpio, “son mis amigos y los quiero mucho pero no creo que cumplan con el perfil, necesitamos a alguien que no vaya a jugar por Lorena Martínez o algún otro aspirante, sino que sean imparcial y líder”.
Adicionalmente, se dijo que en los últimos 30 días los tres principales aspirantes a la candidatura priista para contender por la gubernatura de Aguascalientes, Lorena Martínez Rodríguez, Gabriel Arellano y Miguel Romo Medina se han reunido en múltiples ocasiones con la finalidad de entablar las bases del proceso interno además de las establecidas por el partido.
Desde el punto de vista de Martínez Rodríguez, la unidad será el elemento importante para ganar porque hay condiciones para construirla, y mediante estas reuniones de trabajo se ha encontrado la mejor manera de establecerlas al fijarse reglas mínimas de competencia, pues unidad no significa que no se tenga competitividad, esta es necesaria en todo proceso democrático de lo contrario no se aplicaría su finalidad.
“La competencia puede originar una unidad, el tema es que se lleve de acuerdo a las reglas claras y transparentes”, para que al final del proceso interno todos salgan ganadores y el acreedor a la candidatura tenga la humildad de sumar a sus demás compañeros para hacer una gran planilla efectiva.