Hoy hoy hoy… La Jornada Aguascalientes tiene programa de radio, se transmite los viernes por Radio UAA a las 20:30 horas (94.5 FM y http://radio.uaa.mx/), se llama Algo que decir y participan Alex Zúñiga, Alan Santacruz y Edilberto Aldán, hacemos el comercial por el placer de hacerlo, pero también porque en la emisiones recientes, estos trúhanes (los queremos, chicos) han estado discutiendo acerca de la “administración de la indignación”, hasta ahora no se han puesto de acuerdo, pero creemos que la deliberación acerca de las razones por las que se polarizan al extremo las opiniones y la indignación, sobre todo en redes social, es tan piel sensible, vienen al caso. Ocurre lo mismo con esta columna, no hay día en que no nos duela algún declarante, en que no nos incomode a nivel físico cuando abren la boca y, sin más, la sueltan (como ayer, el diputado Cuauhtémoc Escobedo Tejada reculando sobre la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación acerca del derecho de las parejas homosexuales a adoptar; ay, de nuevo).
Nos sobran los motivos, allá en la radio y acá en el impreso y en todas las plataformas de La Jornada Aguascalientes y no es que seamos de piel sensible, es que si ya saben que somos risueños, ¿pa qué nos hacen cosquillas? Apenas ayer, también, festejábamos la oportunidad de cubrir el X aniversario de la revista del Instituto Cultural de Aguascalientes (ICA) Parteaguas y en un breve repaso, vimos con satisfacción que las manifestaciones de la entidad y sus artistas siempre han tenido espacio en nuestras páginas, en el caso de la revista, desde que Gustavo Vázquez Lozano la concibió, celebramos el arrojo editorial de proponer portadas atrevidas e inteligentes, ediciones para coleccionistas y el esfuerzo por crear un verdadero espacio plural; sí, cuando el cambio de administración y con la llegada de Martín Andrade (a quien le deseamos una pronta recuperación), la revista perdió identidad y en algunos números su calidad dejó mucho que desear, que poco a poco ha vuelto a recuperar, por quienes somos en este periódico, pero sobre todo por lo que queremos que el lector sea, no podíamos faltar al festejo en el Museo Descubre.
Os pido Posada… y en el Museo de José Guadalupe, con la presencia de Blanca Rivera Río, Dulce Ma. Rivas Godoy, Patricia Guajardo, Juan Castañeda y Carlos Castañeda nos alegramos de ver reunida tanta gente que usualmente no asiste a ese tipo de eventos, nos congratulamos de que ahí estuviera sentadito y atento Mario Guevara Palomino, por ejemplo, que llegara Verónica Sánchez Alejandre, aunque fuera nomás de pisa y corre; por supuesto, lamentamos como siempre que los representantes de esa cosa que llamamos izquierda no se tome la molestia de asistir, como también deploramos que para los panistas en el gobierno municipal si no lo organiza Alejandro Vázquez Zúñiga no vayan, o que sólo piensen en la cultura como la (vergonzosa) oportunidad de hacer campaña, como el numerito montado por Antonio Martín del Campo para entregar un reconocimiento a Jorge Ortiz de Pinedo… pero en fin; no alcanzamos a indignarnos porque ya sabemos cómo son. Así que asentimos cuando en la presentación se habló de pluralidad, cuando se definió a Parteaguas como un espacio para ejercer la libertad de expresión… hasta ayer.
La censura como lealtad. Nuestra reportera Mónica Cerbón obtuvo un oficio (ICA-DG-V-400-15), en papelería oficial y firmado por la directora general del Instituto Cultural de Aguascalientes que indica claramente que cuando los funcionarios hablan de libertad de expresión, lo hacen de dientes para afuera. La carta es una amenaza de Dulce María Rivas Godoy para que quienes no piensen que vivimos en jauja se despidan de su trabajo, inicia señalando cómo deben los empleados de esa dependencia hacer uso de las redes sociales, demandando que se abstengan de cualquier interacción con mensajes que estén “denigrando a la integridad de las instituciones gubernamentales a nivel nacional, así como de los funcionarios que las representan”; a pesar de la penosa redacción, la amenaza queda clara en el párrafo final, en el que se exige a los directores de área del ICA a que indiquen al personal a su cargo que eviten retuitear, dar like, reenviar o compartir mensajes que “vulneran la imagen de nuestras instituciones, obstaculizando el progreso de nuestro Estado pues, actuar en el mismo sentido, representa una deslealtad que atenta contra la visión que hoy compartimos, lo que nos obliga a entender que si se encuentra fuera de ella, por ende, no comparte este proyecto de gobierno del cual orgullosamente formamos parte”… Carajo.
Pistas. ¿Se acuerda del escándalo que se hizo cuando Armando Jiménez San Vicente, iba de escritorio en escritorio en la Sedec para demandar la afiliación de sus empleados al PAN de Luis Armando Reynoso Femat?, ¿o se acuerda cuando Carolina Rincón Silva ofrecía en Calvillo plazas en el IEA si votaban por los candidatos de su gobernador?, pues esta carta de Dulce María Rivas Godoy es igual o peor… Ah, este párrafo se titula pistas porque nos acordamos de la fotografías que compartimos a través de Facebook en las que mostramos que Raúl Cuadra se pasea despreocupado en la Central Camionera del Norte, allá en el DF, bueno, pues si alguien anda buscando a Jiménez San Vicente, el extitular de Sedec, anda en Madrid, por si alguien lo quiere encontrar, nos consta y cuando tengamos las pruebas se las compartimos, nomás por el gusto, aunque después los de la mexicanita digan que son suyas y en exclusiva… pobres, ellos y sus paleros.
Vulnerable. Es gravísimo que la titular del ICA demande que los servidores públicos deban “actuar en forma leal, discreta y cautelosa, sin hacer escarnio, difamando y prestándose a seguir propagando mensajes contrarios al ejercicio de gobierno”, peor aún si amenaza con correrlos, es increíble la falta de criterio para hacer un llamado a la lealtad a través de papelería oficial, dando a sus subordinados la instrucción de hacer cumplir su tergiversada idea de lealtad; Dulce María Rivas Godoy está obligada a explicar públicamente las razones de esta amenaza; por supuesto no faltarán “paleros gubernamentales sin rostro” (como atinadamente los calificó Lizeth López Velarde Ramírez) que salgan a defender a la funcionaria, pero más allá de la opinión de quienes lamen la mano de sus amos, esta violación a la libertad de expresión no puede quedar en el aire o justificarse con un chiste, incluso podría denunciarse ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y ver qué nos dice Jesús Eduardo Martín Jáuregui, y no estamos exagerando, con la forma tan poco transparente en que se manejan las instituciones gubernamentales, no dude que la encomienda de la directora del ICA ya se haya cumplido y algún colaborador haya quedado fuera del instituto por “vulnerar” la imagen del gobierno y sus funcionarios.
Obligación. Consideramos que el despropósito oficializado de Dulce María Rivas Godoy debe ser aclarado de frente a la sociedad porque de otra manera, los movimientos de personal en el ICA estarán bajo sospecha, cualquiera de ellos, ¿se le corre por incapaz o por el berrinche de la titular? Que quede claro que no es un llamado al linchamiento, sino una solicitud de rendición de cuentas, al que cualquier funcionario público con vocación de servicio debe estar dispuesto. Ojalá no se minimice la exigencia, porque de otra manera puede ocurrir algo semejante con lo que está pasando con los presuntos asesinos de María del Cristal Acevedo Gómez, pues en el momento en que el fiscal general, Óscar González Mendívil, deliberadamente decidió dar a conocer los resultados de su serendipia a través de un boletín, en vez de una presentación pública que permitiera los cuestionamientos de la prensa, todo se enturbia, al grado de que a quienes se acusa del asesinato hoy podrían quedar libres por sus denuncias de actos de tortura por parte de la policía ministerial. De ese tamaño creemos que es la responsabilidad de los funcionarios que se ocultan tras el comunicado oficial.
La del estribo. Ni ellos mismos se entienden… arremetió el presidente municipal de Rincón de Romos, Fernando Marmolejo Montoya -sí, ese que dicen que ha hecho del municipio una “dictadura perfecta”- en contra de la delegada de la Secretaría de Desarrollo Social, Norma Esparza Herrera, porque las reglas de operación para hacer uso de los recursos federales son tan complejas “que ni ellos mismos las entienden”, razón por la cual los habitantes de Rincón de Romos no pueden recibir el recurso destinado a apoyos sociales, aunque el dinero sí esté físicamente en las arcas de las autoridades: “a veces aunque contamos con el recurso ya para aplicarlo, por las reglas de operación, no lo podemos usar”. La misma situación sucedió hace algún tiempo con las instancias infantiles del estado, mismas que no habían recibido el recurso debido a problemas en las ya muy citadas reglas de operación. Lo que queda claro es que la delegada, antes de andarse ofreciendo para cualquier puesto político que le quieran regalar, debe poner orden en la entrega de los apoyos…
@PurisimaGrilla
Tenia que ser…..que….ande…..Armando…Jimenez….San….Vicente…(..escondido….en…España)….junto….al….Profuugo…..Luis…..Miguel…..Andrea
Ambos…..Huyen…..de….la….Justicia…y….ambos……son……GAYS