Acepta Lozano de la Torre exponer preocupaciones de periodistas a Osorio Chong

• El gobernador priista lamentó el asesinato del fotoperiodista Rubén Espinosa
• Ningún comunicador debe morir, y menos a causa de su trabajo informativo: Alejandro Encinas

Luego de una manifestación pacífica a cargo de fotoperiodistas y periodistas de prensa escrita, televisión, radio e internet, Carlos Lozano de la Torre se comprometió a dialogar con Miguel Ángel Osorio Chong sobre la preocupación que los comunicadores locales sienten en el marco del ejercicio profesional.

Los reporteros se presentaron a la inauguración del Seminario Nacional para Autoridades Municipales Electas con fotografías de Rubén Espinosa Becerril, uno de los últimos colegas asesinados, presumiblemente, producto de su trabajo como colaborador de Proceso y Cuartoscuro en Veracruz.

A Lozano se le pidió diálogo con el secretario de Gobernación, quien hoy visita esta capital para encabezar la clausura del evento mencionado. El priista incluso se ofreció a llevar cualquier oficio que firmaran los manifestantes: “Mientras sea gobernador, independientemente de las posiciones personales de cada periodista o de cada medio, ha habido un respeto irrestricto para que cada quien se manifieste, para que cada quien informe de acuerdo a como lo interpreta”.

Consideró que la prensa de la entidad no tendría motivos para quejarse por el comportamiento de su administración: “A todos nos apena la muerte, no solamente del compañero reportero, sino de las demás personas que ahí estuvieron, y de todos los mexicanos que día con día perecen en la violencia”.

En el crimen, aún bajo investigación, también perdieron la vida Nadia Vera Pérez y Yesenia Quiroz Alfaro, una originaria del Estado de México y otra de Colombia.

El senador Alejandro Encinas Rodríguez también dio muestras de empatía durante el evento al que fue invitado como ponente.

Tras saludar el gesto de los locales, dijo que “hay que manifestar nuestra solidaridad con ellos, con todos los periodistas, los fotoreporteros, y sumarme a la exigencia de que el asesinato del compañero Rubén Espinosa, y el de cuatro mujeres más, sea plenamente esclarecido. Que el gobierno del Distrito Federal a la brevedad posible deslinde y castigue a los responsables”.

Frente a alcaldes electos de todo el país insistió en que “ni un periodista, ni un fotoperiodista más debe ser asesinado, y menos aún en el cumplimiento de su responsabilidad de informar. A todos ellos, nuestra solidaridad”.