- Precipitación en marzo ocurrió de casi 70 milímetros ayudó a disminuir los siniestros forestales
- Preocupa a la Conafor la injerencia de descuidos humanos en la creación de incendios
Tras efectuarse la ceremonia de reconocimiento a la labor de los elementos que conforman las brigadas especializadas, en combate de incendios forestales y manejo del fuego en Aguascalientes, se destacó que la temporada crítica de incendios del 2015 se concluye con 23 incendios y una superficie de 612 hectáreas afectadas.
De ellas, el 88 por ciento fueron pastizales y arbustivas que ya se recuperaron con las precipitaciones presentadas, por lo que ni la Secretaría del Medio Ambiente estatal ni la delegación de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) registraron daños en las masas arbóreas ni ecosistemas grandes del estado.
El 2014 fue un año atípico pues todavía en los meses de octubre a diciembre se tuvo la presencia de incendios, lo que hizo que se incrementaran las hectáreas afectadas a más de 700 con 27 incendio forestales; comparativamente con el 2015, en los primeros tres meses se tuvieron el mayor número de hechos, con 22 incendios y 600 hectáreas dañadas.
Lo que funcionó como determinante para evitar un mayor daño fue que en la segunda quincena de marzo ocurrió una precipitación cercana a los 70 milímetros en todo el estado: “eso nos ayudó a reducir la cantidad de siniestros y además a que los ya efectuados se reconstruyeran rápidamente”, puntualizó un brigadista de la Proespa.
Para el titular de la Conafor en Aguascalientes, las autoridades en la materia deben comprender lo preocupante que es que el 80 por ciento de los incendios se han presentado en la periferia de la ciudad, lo que significa una alta injerencia de la sociedad en la comisión de estos hechos; las razones principales son por bachichas de cigarro prendidas, fogatas mal apagadas, fósforos encendidos y otros descuidos: “eso nos tiene preocupados porque significa que debemos canalizar mayor cantidad de recursos en esta zona”.
Algunas quemas agrícolas se salen de control por no realizarlas en horarios adecuados ni con las medidas preventivas requeridas, razón por la que las autoridades de protección al ambiente reforzaron el trabajo de difusión de la Norma Oficial Mexicana 015, que es la que dicta cómo deben de realizarse, el uso y manejo del fuego.
Para el uso y manejo del fuego el estado cuenta con un equipo de voluntarios adiestrados técnicamente por autoridades federales de la Conafor y a la fecha se tiene un promedio de 250 personas distribuidas en diez brigadas rurales en los once municipios, para la capital se creó un equipo especial con Protección Civil, la Secretaría de Medio Ambiente y la Proespa con 50 personas.
A partir del 2014 cuando se creó el Centro Regional de Manejo del Fuego en Ciudad Guzmán, Jalisco y el Centro Estatal de Manejo del Fuego Aguascalientes, se logró concentrar los esfuerzos para disminuir los tiempo de respuesta, “se pasó de cuatro horas a una hora 45 minutos como máximo”, prueba de ello es que el incendio de mayor magnitud presentado en el estado fue en la comunidad de Peñuelas con 150 hectáreas afectadas, mientras que el resto no fueron más de 18 hectáreas.
La Conafor agregó la oportunidad de haber implementado el modelo de manejo del fuego con el que se indica su comportamientos, así como la integración de una red carretera con brechas secundarias y un cuerpo de agua que les ayuda a saber cuáles pueden ser los sitios donde captar recursos hídricos con el equipo terrestre y aéreo.