- Para lograr su candidatura como presidente nacional del PAN Javier Corral necesita 50 mil firmas
- Confía en que reunirá dos mil 500 firmas de militantes panistas en Aguascalientes
La rebelión de las bases es un movimiento iniciado semanas atrás por el senador panista Javier Corral Jurado, el cual consiste en una gira por los estados en busca de recolectar firmas de la militancia para poder registrarse como candidato a la dirigencia nacional del PAN. La mañana de ayer comenzó su trabajo en Aguascalientes acompañado del exdiputado Alfredo Reyes, asegurándose que lograría conseguir las dos mil 500 firmas requeridas, pues contaba con el apoyo de más de 200 figuras importantes.
En rueda de prensa ofrecida horas antes de abrir el módulo de firmas en la Plaza de Armas, el senador aclaró que a pesar de que muchos le dieron su apoyo a Ricardo Anaya al creer que sólo se tendría un candidato, no significa que no puedan cambiar su postura el día de la votación final: “yo les pido su apoyo para darle viabilidad a este proyecto que busca despertar la conciencia de los panistas”, destacó que se debe terminar con las prácticas de cuidado de las fracciones y sus acuerdos cupulares: “es la hora de rebelarnos contra la mentira y contra la simulación que nos tiene donde estamos”.
Para lograr su registro necesita un total de 50 mil firmas de todo el país, es por ello que convocó a los militantes a La rebelión de las bases para acabar con grupos facciosos y consorcios mediante una jornada especial de diálogo, reuniones, charlas y conferencias, reiterándose que el haber otorgado la firma al otro aspirante (Ricardo Anaya) no significa que al momento de la votación no puedan reflexionar su decisión con base en el escenario actual del partido.
Uno de los problemas que se destacó del proceso interno es que Anaya se adelantó varios meses con los famosos “amarres”, donde para ligar la candidatura se intercambiaban apoyos con figuras estatales para sus candidaturas en el pasado proceso electoral: “ésa es la forma de operar de la estructura actual, eso de decir ‘te conviene con el que va a ser porque si no te irá mal en la elección’, éstos son los amarres condicionantes”, los cuales busca desaparecer como presidente nacional del partido junto al tema de los “moches”.
El partido tiene casos muy señalados de conductas desleales de sus militantes, Corral Jurado criticó que a pesar de haber sido corroborados, la dirigencia nacional del partido no actuó nunca contra ellos dejándolos pasar como errores sin importancia: “yo no le tengo miedo a sancionar a quienes hayan actuado contra la política del partido”.
Indicó que en caso de ser aceptado como candidato y ganador del puesto, se deslindará de las conductas irregulares de algunos miembros panistas, pero también actuará conforme a lo dispuesto en la ley, ya que no cree justo que se deshonre a un instituto político por la falta de valores de ciertos personajes.
