Por ahí dicen que las cosas pasan por algo, cuando entran a su casa y le roban, siempre habrá alguien que le anime diciendo “tómalo por el lado amable, por algo pasan las cosas”, lo mismo sucede cuando lo despiden del trabajo, en los momentos más cruciales de la vida escucha la frase en boca de un buen samaritano. Cuando somos expulsados de nuestra cotidianeidad y obligados a buscar otras alternativas, se genera un caos dentro de nosotros, ahora visualice a toda una sociedad con el mismo síntoma. Qué pasaría si de pronto la naturaleza dejara de proveer el líquido vital, aunado a eso, que los gobiernos perdieran el control del acopio de agua y su distribución, caeríamos en un estado de pánico, el sentido de supervivencia afloraría y pelearíamos por obtener el recurso a como dé lugar, de hecho los expertos en prospectiva, profetas o adivinos del futuro afirman que la próxima guerra mundial será por el control y acopio del agua. Lo bueno, querido lector, es que en Aguascalientes estamos más que listos para enfrentar el desabasto, por lo menos este año y esta temporada, ya ve, tome por el lado amable las inundaciones de la López Mateos y vialidades conocidas, por algo pasan las cosas. Desafortunadamente, en este momento no es la escasez del agua lo que impacta a al tierra de la gente buena, ahora el líquido vital tiene otro color, olor y viscosidad, además de ser el “oro negro” refinado, la gasolina se convirtió en el todo, en el centro de nuestra vida, nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido, dirán por ahí.
Claro, sin combustible no hay movimiento y sin movimiento no hay productividad, y sin productividad no hay ingresos, y sin ingresos no hay que comer y entonces el hombre se extingue de la faz de la tierra, como los dinosaurios ¿se acuerda?
Sin combustible y sin internet no hay posibilidades de que el homo sapiens del siglo XXI subsista en la jungla de la tecnología y el asfalto; cómo le fue la semana pasada en las estaciones de gasolina, dónde encontró el ahora líquido vital, seguramente le limitaron la carga a 25 litros o 200 pesos y recorrió varios lugares, las imágenes desgarradoras de las personas comprando gasolina en tambos, botellas y hasta en frascos de mermelada, gente de la tercera edad, niños de preescolar, adultos, hombres y mujeres en pánico por la escasez que se anunció, que se vive sin duda.
Sin tomar en cuenta que la gasolina es unos de los derivados del petróleo más inflamable, que no necesita exponerse directamente al fuego para que comience a arder, los coterráneos hacen acopio de ésta como si fuera agua y la almacenan sin ninguna precaución. Ojalá no vaya a pasar nada y ningún buen samaritano les tenga que decir “tómalo por el lado amable, por algo pasan las cosas”. No atesore gasolina en casa, si sabe de alguien que lo hace, hágale ver los riesgos que corre. En fin, las imágenes han sido dignas de película apocalíptica de ciencia ficción, desde pleitos en las estaciones de servicio, ordeña de automóviles por parte de la delincuencia, hasta venta en el mercado negro y municipios sin gota de combustible.
A grandes rasgos esta es una radiografía de Aguascalientes, ocasionado por el desabasto de la gasolina, similar panorama debe presentar Nuevo León, Coahuila, Jalisco, Zacatecas, Chihuahua, Puebla, Tlaxcala, Tabasco y San Luis Potosí. La versión oficial que Petróleos Mexicanos (Pemex) ha manejado es que la escasez se debe a tres factores básicos; un nuevo sistema de facturación que no ha logrado registrar los pedidos realizados por las estaciones de servicio para los nuevos suministros; es decir problemas de administración y control básicos en una paraestatal del tamaño de Pemex; otro factor que identifican como detonante del problema es que la refinería de Cadereyta, Nuevo León, no se ha sometido a mantenimiento desde hace ya buen tiempo, ¿será por falta de recurso, por desvió del mismo o por desidia de los funcionarios? Y por último que en los estados fronterizos como Coahuila el robo de combustible se ha incrementado; qué novedad.
Otra versión, la de Francisco Fuentes Saldaña , subdirector de Abastecimiento y Reparto de Petróleos Mexicanos, argumentó que el desabasto en las grandes urbes como Guadalajara y Monterrey es consecuencia del incremento de tomas clandestinas en los nodos de Salamanca y Cadereyta. Para nuestro estado, que es alimentado por el nodo de Salamanca, se identifican 93 tomas clandestinas lo que ocasionó la suspensión del ducto, sin embargo, el funcionario afirmó que esta semana se iba a reactivar.
“Ya está prácticamente solucionado el problema, y el llamado a la población a que estén tranquilos, que no se especule”, dijo Carlos Lozano de la Torre.
Otra de la voces que se hicieron escuchar en el ámbito nacional fue la de Dolores Padierna, quien apuntó que el desabasto se debe a que Petróleos Mexicanos dejó de producir crudo a la refinería para aumentar la exportación y eso ocasionó una reducción en la producción de gasolinas en el país, otra razón que identifica es el incremento de las tomas clandestinas y por último la falta de inversión de la paraestatal.
Las causas son varias, así como las opiniones que de éstas se generen, el hecho está consumado y el desabasto es una realidad, “tómelo por el lado amable, por algo pasan las cosas”, es tiempo de tomar taxis eléctricos, de cambiar de combustible, de detonar la industria de los vehículos eléctricos como los “carritos de golf”, de dejar de depender de la gasolina como el líquido vital que hace que gire el mundo, por lo pronto lo que puede hacer es tomar su bicicleta, disfrutar de la ciudad y mejorar su condición física, por algo pasan las cosas.
Twitter: @ericazocar