- Preocupante, el desinterés de los jóvenes en la prevención de ITS y VIH-SIDA
- Rolando Voces busca capacitar a 750 jóvenes líderes sobre prevención y atención del VIH-SIDA
El Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/SIDA (Censida) a través de su Programa de Acción Específico: Respuesta al VIH, Sida e ITS, lanzó la convocatoria 2015 dirigida a las organizaciones de la sociedad civil con experiencia en prevención del VIH e infecciones de transmisión sexual (ITS), con la finalidad de implementar estrategias de prevención con una respuesta nacional.
La Fundación VIHDHA de Aguascalientes fue una de las acreedoras de recursos federales para la elaboración del proyecto Rolando Voces, el cual inició sus actividades el 9 de julio con los talleres para los líderes de Aguascalientes, Guanajuato y Colima.
El proyecto consiste en la capacitación de líderes jóvenes que a su vez se convierten en replicadores de información con otros de su mismo entorno, a esta estrategia se le llama “educación entre pares”, el primer objetivo fue capacitar a 20 jóvenes que se comprometieron a replicar lo aprendido a mínimo 50 personas más.
Betsy Montoya, colaboradora y enlace nacional del proyecto, detalló que durante cuatro días intensivos se les explicó todo lo relativo a las ITS, como la prueba rápida para la detección de infecciones por VIH, formas de realizar consejerías sobre salud sexual y la prevención del VIH, cuestiones de derechos humanos, de salud, violencia en el noviazgo, autoestima y empoderamiento personal, comunicación y legislación mexicana.
A partir de los conocimientos adquiridos, estos jóvenes líderes tendrán que emprender sus propias actividades con la supervisión de la asociación VIHDHA, con la intención de tener una incidencia en jóvenes de toda la región: “Adicionalmente se creará una página web donde se generarán grupos de discusión impulsados por estos líderes”, supervisados por personal experto en la materia.
Estos jóvenes son principalmente los que ya tienen trayectoria de trabajo en áreas de poblaciones clave y poblaciones en desigualdad, y sólo les falta conocer lo relacionado con el VIH-Sida, y quienes trabajarán en un sector de edad de entre los 25 y 34 años, al ser la sección donde se han presentado las nuevas infecciones por este virus.
A lo largo de cinco meses (de julio a noviembre) se desarrollará el proyecto Rolando Voces con diversos cursos especiales y campaña de comunicación masiva para dar paso a la entrega de informes a la autoridad federal con los resultados obtenidos; la meta planteada es alcanzar las 750 personas como mínimo.
La presidente de esta asociación, Rosalinda Arechar Lara, indicó con preocupación que en todo el país va en incremento el desinterés en jóvenes (sobre todo menores de 25 años) en la prevención de las ITS y del VIH: “hemos encontrado una especie de desinterés y apatía hacia la prevención pese a tener toda la información en la mano”, esto debido a que al mejorarse tratamientos y el gobierno costear todo el medicamento se llega a creer que si se infectan no habrá mayor conflicto que el recibir tratamiento.
Esa apatía juvenil es preocupante, pues ahora no sólo se tiene que trabajar en informar sobre las consecuencias de contraer alguna infección de transmisión sexual, sino también en tratar de convencerlos que no es ningún juego ni una situación fácil de llevar en la vida: “pese a toda la información estos chicos se están exponiendo demasiado a los riesgos”, por lo cual esta asociación trabajó por ser acreedora a este patrocinio y solventar ese reto social.
También se tiene el registro de una transformación en las poblaciones claves, anteriormente la epidemia se concentraba en hombres que tenían sexo con hombres y ahora se revierte con las mujeres: “cada vez más hay más mujeres infectadas y eso no se está atendiendo”, y en un futuro cercano se reflejará más en una población infectada de jóvenes, por esta situación de apatía a la prevención y por confundir que la protección se basa únicamente en la anticoncepción.
Contrario a lo señalado por el Colectivo SerGay sobre la ausente participación de los gobiernos en programas de prevención y atención al VIH-Sida, el encargado de comunicación de VIHDHA, Marco García Robles, consideró que ha habido una fuerte evolución en materia de programas y campañas informativas con estudios más avanzados -o al menos con sectores más específicos-, como el trabajo interinstitucional que hace el Consejo Nacional de Población con la campaña dirigida a jóvenes sobre prevención de embarazos no deseados, que van de la mano con la prevención del VIH-Sida.
“Aunque probablemente no se tengan los resultados esperados, esto es una cuestión gradual y tiene que irse poco a poco”, sin embargo, sí se requiere de un mayor trabajo de investigación sobre las poblaciones claves (antes llamados grupos de riesgo), que son grupos de población donde puede existir más probabilidad de infección o donde las prácticas sexuales implican la posibilidad de transmisión. Para Arechar Lara, las investigaciones deben ser aplicadas en grupos mayores desde lo sicológico, sociológico y médico para conocer realmente lo que pasa en las localidades, regiones y en el ámbito nacional, y que esto se traduzca en acciones directamente proporcionales entre la divulgación y la acción.
En materia nacional, el Censida procura hacer este tipo de análisis porque tiene que plantear sus estrategias en función a lo que sucede en cada sección, por ejemplo para este segundo semestre del año deben atender al público femenino, usuarios de drogas inyectables en el norte del país, zonas industriales de Guanajuato y a migrantes en el sur de México.
