- Su pasada implementación sirvió para identificar deficiencias y cuestiones por corregir
- La realidad de convertirse en el sistema para emitir el voto será a mediano y largo plazo
- La Junta Local del INE descartó que el IEE pueda llevar a cabo el mismo esquema
Luego de que se diera a conocer la implementación de una prueba piloto sobre el uso de la urna electrónica en la entidad, como parte de un esquema experimental junto con otros estados como Hidalgo y Chihuahua, el Instituto Nacional Electoral (INE) en Aguascalientes informó que para la elección federal de 2018 se esperaría repetir el esquema, tomando en cuenta la corrección de las deficiencia y problemas técnicos a los que se enfrentó el pasado domingo 7 de junio.
Ignacio Ruelas Olvera, vocal ejecutivo del INE en la entidad, recordó que de las 445 casillas donde se planeaba instalar sólo se pudo lograr en un total de 300, ya que en las restantes la ausencia de los prestadores de servicio social, jóvenes estudiantes de preparatoria, evitó desarrollar la labor de difusión e invitación a su utilización.
Aseveró que con las 300 que pudieron funcionar se ha obtenido una importante prueba experimental, que trae consigo la identificación de todos aquellos factores y elementos que inciden en su viabilidad para ser utilizada como forma real de emitir el voto.
Entre los principales retos que plantea su adopción como esquema base de emisión del voto, Ruelas Olvera aseguró que la prueba piloto ha permitido identificar la viabilidad y resistencia de la urna, ante el uso durante toda la jornada electoral, la eficiencia de la tinta y el papel que utiliza, así como otros elementos técnicos que podrán ser previstos en una futura adopción. Por lo pronto descartó que el Instituto Estatal Electoral (IEE) pueda sumarse a la utilización de la herramienta en el nivel local, durante el próximo proceso electoral local que desarrollaría su jornada electoral en junio de 2016.
“Sería una utopía pensar que en 2018 ya podemos implementarlo como sistema de voto real”, afirmó que se mantendrá como prueba piloto con la intención de ser incorporada al sistema electoral en el mediano y largo plazo, garantizando así que se reduzca el costo electoral para el país, ya que su implementación obligaría a prescindir de la utilización del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), que representa un importante coste para el INE, además de otros rubros, como la documentación y el material electoral, tomando en cuenta que cada boleta cuesta aproximadamente 60 centavos, a lo que se sumaría el resto de los insumos y la capacitación.