- Se busca mejorar áreas de la Feria como bienestar animal, aseo y alumbrado público
- Los dos carruseles de ponis suspendidos no recibieron sanción económica
Con la conclusión de la 187 edición de la Feria Nacional de San Marcos, Héctor Anaya Pérez, titular de la Secretaría de Servicios Públicos (SSPM), indicó que se entregará una serie de recomendaciones al Patronato de la Feria en áreas como bienestar animal, aseo y alumbrado público, que espera se puedan atender el próximo año luego de que un carrusel de ponis fuera suspendido temporalmente.
Esta información derivó al cuestionarle si considera que se deben seguir otorgando permisos a los carruseles de ponis, luego de que comentara hace una semana que uno de estos negocios fue suspendido temporalmente por maltrato animal, “las autorizaciones las realiza el Patronato, nosotros emitimos una serie de recomendaciones, definitivamente que siempre hay áreas de oportunidad y nosotros ya tenemos una serie de advertencias y de conclusiones que en su oportunidad le vamos a hacer llegar al Patronato para que la tome en cuenta en la próxima edición”.
El funcionario subrayó que fueron cuatro y no dos los carruseles de ponis que trabajaron durante la Feria, de éstos, la mitad fue sancionada temporalmente, “(…) hasta en tanto que nos acreditaran que un médico veterinario certificara que los animales estaban en condiciones para poder desarrollar su actividad, y efectivamente así sucedió, una vez que lo acreditaron se les volvió a autorizar para que funcionaran, bajo los criterios de que tenían que descansar tres horas y ya pudieran reanudar actividades por otras tres horas”.
Sin embargo, apuntó que no hubo sanción económica por maltratar a los animales, “sus pezuñas se empezaban a abrir precisamente por el exceso de trabajo, y una de la indicaciones del señor alcalde es que la Secretaría se distinga por priorizar el bienestar animal en todos sus ámbitos de competencia”.
Una de las recomendaciones que hizo Servicios Públicos, además de los descansos durante las jornadas, fue que tuvieran una cama de aserrín para proteger las patas de los ponis.