- Marabunta Central de Artes Libres A.C. busca refrescar a los profesionistas pero también crear nuevos públicos
- Transforman una bodega industrial en un centro de arte circense y escénico abierto a todo público
Con dos años de creación, Marabunta Central de Artes Libres A.C. organiza la segunda edición del Encuentro Internacional de Circo Contemporáneo, el cual consiste en tres fines de semana de talleres intensivos (del 20 de marzo al 5 de abril) impartidos por profesionales en el circo contemporáneo y artes escénicas, tanto de México como de otros países como Uruguay y Chile.
Martín Solchaga, uno de los fundadores de la agrupación, señala que al contar con un espacio propio el costo de dicho evento disminuye considerablemente, permitiéndoles ofrecer el servicio con tan sólo una cuota de recuperación para gastos meramente necesarios, “este encuentro no persigue ningún fin de lucro, las cuotas de recuperación son estrictamente para sustentar los gastos del mismo”.
Al analizar los resultados del año pasado en la primera edición, se fijó una expectativa de tener registradas a al menos 12 personas por taller; sin embargo, debido a la difusión que se le está dando con apoyo del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura y diversas figuras del arte y la cultura local, se cree que rebasarán en número y en calidad.
En cada taller se brindará la experiencia y el conocimiento de profesionales en diversas disciplinas que acogen el arte circense y escénico; entre ellos el de escenografía e iluminación, voz, teatro físico, dramaturgia, “desplázate” (técnica mixta de hip hop con danza contemporánea), elementos circenses como cuerda y trapecio.
Como organizadores del encuentro, Marabunta Central de Artes Libres busca ofrecer un espacio de reunión para la creación y formación de las artes y la cultura, refrescando los conocimientos y la práctica desde la experiencia de diferentes figuras, todo en aras de ir creando nuevos públicos en la entidad.
“Con nosotros vienen personas que no tienen nada que ver con el arte pero que vienen a tomar talleres o cursos, y ya después los vemos organizándose solitos para ir a una obra o a un concierto”, poco a poco la comunidad, en este caso del arte circense y escénico, va retroalimentándose y mejorando su actuar para llamar la atención de más públicos y mantener los de antaño.
“El movimiento crea movimiento, por eso nuestra intención es revalorar el trabajo que ya está, mejorarlo y mostrárselo a la gente”, de ahí la importancia de tener este acercamiento entre el público en general y aquellos actores del quehacer artístico de otras latitudes. Para este amante del teatro y circo, la interacción es la base para mantener esa chispa que otorga fuego y vida a cualquier proyecto.
Aunque se trata de disciplinas nada fáciles de ejecutar (como el trapecio, por ejemplo), el Encuentro está abierto a todo público, no se necesita ser especialista ni tener experiencia en el área. Este fin de semana de apertura se imparte el taller “Cuerpo expresivo en Trapecio Fijo” por la uruguaya María Noel Rosas; mismo que tiene el objetivo de que a través de prácticas concretas se logre abrir los niveles de experiencia acrobática y expresiva para encontrar otros lugares de relación con el trapecio.
La especialista en acrobacia aérea abordará el lenguaje técnico y postural así como propuestas propias que lleven al cuerpo a un estado “más sensible y creativo”, aprovechándose del conocimiento de cada usuario para investigar/habitar espacios y temporalidades en el aéreo.
Para el segundo taller se tendrá la visita de Iván Olivares (oriundo del Distrito Federal) del 27 al 29 de marzo, titulado “El actor-dramaturgo desde la escena”. En este se enfocarán a la creación de la poética y dominio de las estructuras que conforman los espectáculos escénicos. Uno de sus objetivos es conocer y desarrollar los elementos estructurales y habilidades teórico-prácticos en la construcción de una dramaturgia, para una puesta en escena sin palabras, así como su ejecución como directores del mismo.
Este dramaturgo y director mexicano trabajó durante muchos años en teatro de títeres para niños, actualmente sus textos son mayormente dirigidos a los adultos por poseer una fuerte crítica social y política.
Marabunta Central de Artes Libres A.C. adecuó una bodega rentada como un circo, lleno de colores, dibujos, colchonetas, trapecios, telas, espejos, y sin olvidar la característica principal de un espacio circense: la carpa rayada. A pesar de ser un lugar sencillo, los usuarios asiduos (alrededor de 65 de todas las edades) consideran ser una iniciativa que va más allá del área artístico, “aquí no sólo nos enseñan cosas de teatro, danza o circo, sino también a convivir, a ser responsables y a pagar por ver espectáculos de calidad”, algo que hasta la fecha se continúa trabajando por lograrse, ya que en su mayoría las personas insisten en recibir “todo gratis”.
Aunque para Marabunta esto es “vivir siempre en la cuerda floja”, todo es cuestión de paciencia, voluntad y costumbre, de estar ahí empujando gota a gota hasta lograr que un público se acerque a las artes desde distintas formas, una de ellas pagando determinada cantidad de dinero.
Además de los talleres diarios que ofrecen, este colectivo de artistas diseña espectáculos multidisciplinarios para llevarlos a festivales, encuentros, ferias, comunidades, municipios; a todo espacio que permita expresar el arte.
Este centro está ubicado en Héroe de Nacozari norte número 2207-C en la colonia Morelos, una bodega industrial convertida en un espacio cultural en la espera de ser explotado por cualquier ser humano interesado en las artes escénicas y circenses.