- La tendencia seguirá al alza en los próximos años: Carlos Lozano de la Torre
- La economía creció al 11.3%, aunque el 40.3% de la población no podía comprar una canasta básica
El observatorio México, ¿cómo vamos? determinó que al tercer trimestre de 2014 Aguascalientes era el estado con la mayor tasa de crecimiento económico: 11.3 por ciento. Así consta en el informe Hay un México que crece, ¿dónde está?: Semáforos económicos estatales.
Carlos Lozano de la Torre estuvo en la Ciudad de México para recoger un reconocimiento avalado por estudiosos del Instituto Mexicano para la Competitividad. El estado superó a Querétaro, cuyo porcentaje de crecimiento quedó en 6.4, a Nuevo León, con 4.7, e incluso al Estado de México y al Distrito Federal, los cuales vieron crecimiento del 0.6 y cero por ciento, respectivamente.
El reporte presentado también menciona que el 40.3 por ciento de los aguascalentenses padecen pobreza salarial -no les alcanza para comprar una canasta básica-. Sin embargo se advierte un avance, pues en 2013 el 40.6 por ciento se encontraba en esa situación. Hay estados peor parados en el ramo. El 70.1 por ciento de los chiapanecos sufren esta clase de pobreza.
Los cálculos publicados dicen que Aguascalientes satisfizo la demanda de empleo para los jóvenes con necesidad de incorporarse a la población económicamente activa. Debía generar cuatro mil 500 puestos e hizo lo propio con siete mil 441.
El bemol está en el oficialismo. Aún existe la encomienda de reducir el porcentaje de empleos ligados al aparato de gobierno, mismo que dio un salto, del 5.2 al 5.6. Cada hora laboral en Aguascalientes deja un saldo de 885 pesos, cuando en 2013 se habla de 708. La informalidad retrocedió 3.5 puntos porcentuales, para ubicarse diez puntos por debajo de la media nacional. Ayer, en el evento de premiación, Lozano de la Torre consideró que el Distrito Federal debería planear mejor el aterrizaje de empresas: “Al bajío están llegando prácticamente todas. Interesantísimo ver que el bajío desplazó a la frontera, a la frontera se estaba yendo la mayor parte de las empresas anteriormente. Yo creo que apostarle a este tema es muy importante. Se me ha preguntado muchas veces si poner todos los huevos en una canasta, en este caso la industria automotriz, pues… habría que ver cómo están divididos los otros sectores, es un círculo virtuoso. Aguascalientes va a seguir creciendo en los próximos años”.
El priista dijo que las plantas de Nissan en Aguascalientes corren menos riesgo de entrar en crisis que otras de la misma compañía en distintos sitios del globo. “Yo le seguiría apostando”.
El panel de especialistas estuvo integrado por Viridiana Ríos, directora de México ¿cómo vamos?, Miguel Molano, director general adjunto del Instituto Mexicano para la Competitividad, y José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico.
Se mencionó que si bien la esfera automotriz podía ser trampolín para la incursión a las tecnologías aeroespacial o de la información, “el México pobre” representaba un problema de arranque.
“Si la gente está empujando un arado hoy, es difícil que mañana esté programando software o que esté operando maquinaria compleja. Realmente tienes que empezar por industrias intermedias, por industrias de transición, donde haya cosas que puedan hacer, ese modelo todavía no está muy claro”.
José Gutiérrez Jardón, secretario de Desarrollo Económico y Competitividad de Coahuila -otro de los premiados-, destacó el ambiente propicio para que los estados se sumaran a las cadenas de proveeduría automotriz.
En opinión de los expertos, “como país no podemos apostar a un solo sector. Existen programas de desarrollo regional, algunos estados irán hacia agroindustrias de alto valor agregado donde puedas aplicar biotecnología, nanotecnología para desarrollar pequeñas y medianas empresas más productivas, empresas de transición que se dediquen más a la maquila”.
