El PRI está preparado para conducir las mejores campañas con los mejores candidatos. La solvencia ética de las mujeres y los hombres que respalda nuestro partido ha sido sometida a un riguroso proceso de valoración. Nuestra institución política busca garantizar a la ciudadanía que votar por nosotros, será votar por el apego a la legalidad, la capacidad y la rendición de cuentas.
Gregorio Zamarripa Delgado, María de los Ángeles Aguilera y Jesús Ríos Alba, en Aguascalientes, así como las personas que, a nivel nacional, nutren los cuadros electorales del PRI para las elecciones locales y federales en puerta han sido fiscalizados como nunca, para cumplir de cara a la sociedad y demostrar que sus declaraciones patrimoniales están en orden, que pagan impuestos y no tienen ningún proceso legal que ponga en duda su honorabilidad.
Nuestros cuadros políticos tienen presencia social, credibilidad, ideas y propuestas puntuales para asumir los retos de la modernidad y la transformación nacional. La solvencia de nuestra candidata y nuestros candidatos, nos permite anticipar el respaldo ciudadano en las próximas elecciones.
Celebramos que la nueva legislación electoral nacional, fruto del consenso, sea más rigurosa y exigente con los partidos políticos. En la medida en que todos construyamos una democracia más transparente, estaremos generando mayor confianza en nuestras instituciones y en los procesos electorales. Como ha señalado César Camacho, “la legislación electoral busca, en suma, que la política electoral valga tanto como lo que cuesta”. Esto es vital para el futuro de la República.
El progreso de la cultura de la transparencia y la rendición de cuentas, está cambiando la vida pública. Está posibilitando una larga vida a nuestra democracia. También, los procesos electorales están hoy en día en una caja de cristal, que permite a los electores tomar la mejor decisión al momento de emitir su voto.
La fuerza de la ética, llevará a los ciudadanos a elegir a las mejores personas como sus representantes. La fuerza de la ética política, conducirá al triunfo a las candidatas y a los candidatos del PRI.
En nuestro partido hemos asumido el reto de transformar a México. Estamos convencidos de que los partidos políticos y las candidaturas independientes, están llamados a ser el cauce resolutivo de las demandas y de las causas ciudadanas.Los actores políticos debemos permanecer alejados de la voluntad y el dinero de los poderes fácticos, aun cuando sean de origen lícito, no digamos los ilícitos. La ética pública, debe ser nuestro camino. Particularmente, los partidos políticos, por mandato constitucional, “tienen como fin promover la participación del pueblo en la vida democrática”.
La indiferencia hacia la vida pública, es nuestro mayor enemigo. El abstencionismo es el cuerpo de inacción política nacional que debemos derrotar. Podremos despertar el entusiasmo por la renovación y la transformación nacional, si somos actores verdaderos de la evolución democrática.
Hace un cuarto de siglo Luis Donaldo Colosio dejó en claro: “Han cambiado los tiempos y las formas del quehacer político, y esto, ha sucedido mediante el voto”. Hoy debemos acudir nuevamente a la innovación política con clara apertura a la rendición de cuentas, haciendo converger la pluralidad y la diversidad, sabiendo representar con mayor efectividad al ciudadano.
Muchas veces se olvida, quizás intencionalmente, que el PRI ha trazado y encabezado, desde sus inicios, la apertura y el cambio democrático. Se han desarrollado una infinidad de mitos alrededor de nuestra institución política. Múltiples mentiras.
La verdad es otra. El PRI, conductor de la revolución social, surge como partido político para derrocar el caudillismo y la obsesión por la permanencia en el poder. El PRI, en la década de 1970, dirige la apertura política integral, con el uso de la virtud republicana y la eficaz guía de don Jesús Reyes Heroles. Fue iniciativa del PRI la creación del IFE. Nuestra voz y nuestra voluntad continúan impulsando el perfeccionamiento democrático. Recientemente, promovimos el Pacto por México, con la participación activa de otras importantes fuerzas políticas,del cual surgió la convergencia nacional para la nueva reforma electoral.
Gracias a un histórico y vasto esfuerzo encabezado por el PRI y respaldado por amplios sectores sociales, hoy los ciudadanos pueden colocar una lupa sobre los partidos políticos y las candidaturas a puestos de elección popular.
Es nuestro deber ampliar la legitimidad de las instituciones del Estado mexicano, principalmente, a través de la apertura democrática y el perfeccionamiento de nuestros mecanismos de transparencia y rendición de cuentas.
El PRI ha impulsado los más profundos cambios institucionales de nuestra democracia, en los siglos XX y XXI. Las puertas de nuestro partido hoy están más abiertas que nunca. Estamos abiertos a la ciudadanía, a todas las tendencias, a todas las ideas republicanas. Somos hoy una caja de cristal. Somos el prisma de la transformación nacional.